La Selección de Aragón comienza a competir

En el capítulo anterior de este modesto coleccionable, dedicado al Divino Ricardo Zamora, el mejor guardameta del mundo, quien llegó a defender la portería de la S.D. Iberia en 1923, recordábamos que el campo del Real Zaragoza C.D. fue testigo tres años después de un partido de entrenamiento de la Selección Española frente a una Selección Aragonesa que finalizó con el bien digno resultado del empate a uno, como preparación del choque España vs Hungría que se disputó poco después en Vigo.

Desde luego este enfrentamiento amistoso de 1926 en el que nuestros paisanos ejercieron de meros sparrings contra ese primigenio combinado español, cuyo mayor logro deportivo durante varias décadas fue la medalla de plata en los Juegos Olímpicos celebrados en la ciudad belga de Amberes en 1920, no fue la primera vez que unía a un puñado de aragoneses en la disputa de un partido futbolístico. Ya las crónicas antiguas nos dan el dato de sendos enfrentamientos celebrados en tan lejana fecha de 1918 en Valencia contra una selección de los mejores jugadores de dicha Comunidad que terminaron con otras tantas rotundas victorias locales por 5 y 3 goles a cero … ya conocen los amables lectores lo que los miembros de la raza calé dicen en relación a los principios, pues eso …

Pero fue mediante la enorme aportación del imprescindible José María Muniesa en la creación de la Federación Española de Fútbol como se lograría, no sólo una Selección oficial de futbolistas aragoneses, que como siempre, sería criticada y cuestionada desde el diario decano de la región aragonesa dominado por el seguidor del Real Stádium Miguel Gay, sino que se llegaran a disputar en el transcurso del año 1924 tres enfrentamientos interregionales, de categoría oficial, contra Cantabria.

La puesta de largo oficial de nuestra selección tendría lugar en los Campos de Sport de Santander el 9 de marzo y para su preparación se disputaron en el campo del Iberia dos partidos de entrenamiento con el objetivo de escoger a los mejores futbolistas que representarían no sólo a Aragón en conjunto sino concretamente a la joven Federación Aragonesa de Fútbol en el convencimiento de que una susceptible victoria frente a los montañeses, representantes de una también joven Federación Cántabra, multiplicaría la importancia del fútbol aragonés en el ámbito estatal verificando sobre el césped el estatus adquirido por nuestros delegados, cuyo portavoz era el bueno de Muniesa, en las habitualmente beligerantes asambleas del fútbol español.

Las expectativas deseadas por la expedición, que partió un viernes en el tren rápido de Bilbao con destino final en la capital cántabra, encabezada por el propio Muniesa, el colegiado Antonio Adrados y los jugadores Messeguer, Becana, Albea, Unanue, Ezcurdia, Cano, Clemente, Ostalé, Santías, Aróstegui, Fernández, Ezquerra y el capitán Buylla, fueron derrotadas por un contundente 3-0 a pesar del concierto final ofrecido por el Orfeón Aires de la Tierruca, obsequio del Rácing Club de Santander. El gozo en un pozo … pasiego.

Al inte se pacta la celebración de un segundo partido de revancha a disputar en Aragón para el que se designa un comité seleccionador integrado por dos directivos, Muniesa y José María Gayarre y el capitán Buylla mejor jugador y que ante el grupo integrado por estudiantes y la ausencia de entrenador se encargaría de gestionar el juego del equipo como capitán con mando en plaza.

El campo del Iberia fue testigo de dicha revancha el 20 de abril de dicho año 1924, que bajo la batuta del colegiado cántabro Balbás y en las líneas Adrados y Pamplona, los aragoneses Messeguer, Ezquerra, Albea, Pujana, Lafuente, Jacobo, Ayestarán, Recondo, Santías, Lueña y el capitán Buylla se impusieron por un cómodo 2-0.

El detalle orfeonístico de la ida se cambió en este partido revancha por un banquete que también sirvió para entregar los trofeos respectivos a los equipos aragoneses campeones de las cuatro categorías de futbol aragonés, Stadium (campeón de primera categoría en esa temporada 1923-1924 y por tanto casificado para la disputa del campeonato de España), Huesca, Recreación y Patria.

Mas como en aquel fútbol primigenio más que los marcadores primaban las victorias y derrotas, y en ese recuento había un equilibrio de partidos ganados, fue acordada la disputa de un tercer partido final de desempate que se celebró al día siguiente a las seis de la tarde en Torrero y en el que los nuestros, con Camón sustituyendo al lesionado Albea se impusieron por dos goles a uno y se proclamaron vencedores en este suigeneris torneo interregional.

Por desgracia y en contraposición a otras Comunidades vecinas, la Selección de Aragón no ha tenido una competición regular ni siquiera periódica, de hecho apenas un par de decenas de partidos disputados desde las derrotas sufridas en 1918 por tierras valencianas. Tras el amistoso empate contra España en 1926 una victoria a Catalunya en 1930, nada en los años 40, cinco partidos en los 50, cuatro de ellos (tres victorias y un empate) contra la francesa selección del Bearn- Pirineos Atlánticos a corriente del vínculo entre Zaragoza y Pau, nada en los 60, un partido en 1973, empate contra el Zaragoza, nada en los 80, en 1998 empate y 2002 victoria contra Castilla-León y su único partido contra una selección Fifa, victoria contra Chile 2006. En fin, una pena que no sigamos creciendo en Fútbol, pero es lo que hay y espero les haya gustado. Continuará…

Ánchel Cortés.
Productor y Académico de Televisión
Abonado del Real Zaragoza nº 1.625.