Real Zaragoza 0 – 2 FC Barcelona | Crónica
Eto’o y el racismo nos alejan de Europa
Durante 75 minutos el Zaragoza fue mejor que un FC Barcelona timorato y a la defensiva. Pero el polémico jugador de color, Samuel Eto’o, se erigió como protagonista, y no por sus goles, sino por su amenaza de abandonar el estadio por algunos gritos racistas que provenían de la grada. El partido se oscureció, Celades se creyó César por un segundo, paró un remate de Edmilson, fue expulsado, se pitó penalty, Ronaldinho lo marcó y en la siguiente jugada, una contra, y gol de Larsson. Con este resultado el Zaragoza se aleja casi definitivamente de los puestos de Europa.
Si decimos que el protagonista de un partido ha sido Samuel Eto’o, todos nos imaginaremos que el jugador camerunés habrá marcado algún gol en el partido y se habrá salido en las jugadas de su equipo. Pero en el partido de la Romareda Eto’o se erigió como protagonista porque se quiso ir del estadio, porque en el encuentro nunca estuvo.
El sudafricano, que en ningún momento del partido había sido increpado por la grada, se acercó a sacar un córner, la primera acción de peligro del Barça en todo el partido, y corría el minuto 71, y ahí comenzaron los gritos racistas, escasos, pero audibles. Unos gritos incomprensibles en los tiempos en los que corren, pero tan ofensivos como cualquier otro insulto que se profiera a un jugador de raza blanca o al propio árbitro, o incluso un poquito menos que los insultos que se han vertido sobre la Virgen del Pilar, objeto de culto y no de babosadas, por parte de la afición culé.
Pero sin embargo, a ninguno de los jugadores se le hubiera ocurrido amenazar con abandonar el estadio por escuchar dichos insultos. Eto’o sí lo hizo. Embarulló el partido y consiguió que emergiera su figura no por su juego, escaso sobre el césped de La Romareda, sino por su amago de huida. Así las cosas en 15 minutos el Barça, sin merecerlo, se llevaba los tres puntos del municipal y aleja, prácticamente de forma definitiva al Real Zaragoza de los puestos nobles de la clasificación.
La película comenzaba con un minuto de silencio por la memoria del mítico jugador vasco «Zarra» fallecido hace escasos días. Y tras el pitido de Esquinas Torres, uno más de la larga colección de vasallos de Sánchez Armínio, comenzaba el espectáculo futbolísitico. El Barça había aprendido del partido de la Copa y aparecía cauto atrás, bien cerradito y cediendo el balón al Zaragoza, para evitar que Cani, Ewerthon y Diego Milito hicieran de las suyas en alguna contra. Prueba de ello es que la única jugada de peligro del equipo catalán llegaba tras un fallo de Gaby Milito en defensa, en la que el argentino no despeja, deja pasar para César y es Messi el que recoge el balón y apunto está de batir al guardameta castellano del Real Zaragoza.
El equipo aragonés controlaba el partido pero no profundizaba, no creaba ocasiones claras de peligro. La ocasión más clara de los aragoneses llegaba tras una buena jugada en banda izquierda de Delio Toledo, más entonado que de costumbre, que cede a Ewerthon para que en la frontal del área se invente un zurriagazo que Valdés tuvo que enviar a Córner. Con esto se resumía el poder ofensivo de ambos equipos en una primera parte preventiva y en la que había mayor preocupación por evitar que marcara el equipo contrario que por adelantarse en el marcador.
La segunda parte comenzó mejor para los zaragocistas. Si en la primera parte el Barça no inquietó la portería de César salvo en una ocasión, en la segunda parte todavía peor. El equipo catalán se veía incapaz de frenar a un Zaragoza que combinaba mejor gracias a las recuperaciones de un Zapater colosal, a la imaginación de un Cani que poco a poco se fue diluyendo, a la velocidad de Ewerthon y a la entrega de Diego Milito. Sin embargo, esa calidad no fue suficiente para perforar la portería de Valdés.
Con todo esto se llegaba al minuto 71, minuto en el cual, no sabemos muy bien si de forma premeditada o no, se montó lo que todos conocemos. No voy a defender en ningún caso los gritos racistas, que me parecen completamente fuera de lugar en pleno siglo XXI, pero los gritos que se escucharon en el municipal no creo que fueran muy distintos a los que el camerunés oye en otros estadios, ni muy distintos a los que Roberto Carlos oye en el Nou Camp, ni muy distintos a los que Ewerthon sufrió en el Reyno de Navarra hace una semana, ni muy distintos a los sonidos guturales que salen por la boca de algunos que prefieren eso al insulto directo. Pero claro, el famoso «uh uh uh» se oye más cuando nada te sale y cuando tu equipo es incapaz de hilar jugada alguna. Entonces «tú» te cabreas y como en el patio de colegio dices que te vas, y no te llevas la pelota porque es del equipo contrario que sino, seguro te la llevabas. Que no está bien, pues claro que no, pero los jugadores deben estar por encima de todos esos descerebrados que se dejan en evidencia ellos solitos.
Así fue la historia de un partido que el Zaragoza tenia controlado y que Eto’o y el racismo se encargaron de estropear. Poco importa que Celades viera la roja tras un auténtico paradón tras volea de Edmilson, que remataba el saque de esquina que generó la polémica. Poco importa que tan sólo 2 minutos después el propio Eto’o, que se enchufó en 7 minutos al partido como no lo había hecho en los 71 anteriores, se marcara un jugadón por banda izquierda, que acabó con un remate de Larsson a las mallas del fondo norte. Todo eso poco importaba ya. El partido había muerto en el minuto 71 y con él las aspiraciones de un Zaragoza que se aleja casi de forma definitiva de las posiciones de UEFA. Todo por Eto’o, provocador donde los haya, y por culpa de unos cuantos que hacen del racismo una diversión. Lamentable.
Ficha Técnica
Real Zaragoza:
César; Ponzio, Alvaro, Gabriel Milito, Toledo (Cuartero, min.82); Zapater (Savio, min.85), Celades; Oscar (Generelo, min.82), Ewerthon, Cani; y Diego Milito.
FC Barcelona:
Víctor Valdés; Belletti, Márquez, Puyol, Sylvinho; Edmilson, Deco, Motta (Van Bommel, min.55); Messi (Larsson, min.70), Ronaldinho (Iniesta, min.86); y Etoo.
Goles:
0-1. Min.78, Ronaldinho de penalti; 0-2. Min.82, Larsson.
Árbitro:
Esquinas Torres del Comité Madrileño. Expulsó con tarjeta roja directa al local Albert Celades en el minuto 78. Amonestó con cartulina amarilla al local Diego Milito.
Incidencias:
partido correspondiente a la vigésima quinta jornada de la Liga de Primera División disputado en el estadio de La Romareda ante unos treinta mil espectadores en fría y lluviosa, con terreno de juego en buen estado. Se guardó un minuto de silencio por los recientes fallecimientos del ex futbolista Telmo Zarraonandía ‘Zarra’ y de la madre del ex jugador del Real Zaragoza y técnico Manolo Nieves.
Puntuaciones (de 0 a 5)
César: 2. No tuvo excesivo trabajo pero no se mostró seguro. Prueba de ello es un disparo de Ronaldinho desde la frontal que no pudo atajar y que apunto está de robar Eto’o.
Ponzio: 3. Secó por completo a Ronaldinho, como hiciera en el partido de ida de los cuartos de final de la copa. Estuvo serio en defensa y anduvo fino en el pase. El único «pero», que no se incorporase en un mayor número de ocasiones al ataque.
Álvaro: 3. Estuvo seguro y decisivo en defensa. Se mantuvo serio y marcó a Eto’o de cerca durante todo el encuentro. Prueba de ello es que el camerunés sólo apareció para liarla.
Gaby Milito: 2. Aprueba por poco. No estuvo muy fino el central argentino. Tuvo dos errores de bulto que aunque no tuvieron mayores consecuencias no son permisivos ante el FC Barcelona. Fue de menos a más.
Toledo: 2. Extrañamente estuvo más que correcto el lateral paraguayo. Secó por completo a Messi y se sumó con acierto al ataque. Por fin veíamos a Toeldo superar la línea de la medular.
Celades: 3. Estuvo bien en la dirección del equipo y casi perfecto en el pase. Sin embargo, confundió su posición con la de César en el remate de Edmilson tras saque de córner. Hizo un paradón y por lo tanto, «penalty y expulsión».
Zapater: 3. Estuvo perfecto en el corte, en la recuperación y también en el pase e inicio de las jugadas. Fue un coloso en el centro del campo y de hecho él solito pudo con los medioscentros catalanes.
Óscar: 2. Estuvo luchador, más que en ocasiones anteriores, pero una vez más volvió a fallar en los metros finales. Le falta decisión y seguridad. Tiene los días contados en el 11 titular.
Cani: 3. El de Torrero para nada notó su bajón moral por la incompetencia del seleccionador español. Estuvo como siempre, aunque fue de más a menos. Cabe destacar una gran jugada que protagonizó aunque no pudo culminar, y que demuestra su enorme calidad, caño incluido.
Ewerthon: 3. Protagonizó la mejor ocasión de peligro zaragocista con un disparo desde la frontal que hace lucirse a Valdés. Además fue clave en la decisión de Eto’o de no marcharse del estadio.
Diego Milito: 3. Estuvo luchador. No dio nunca un balón por perdido aunque no tuvo su noche. La grada de hinchas del Barça lo insultó hasta la saciedad y no tomó la decisión de marcharse del estadio. Por otro lado, y fruto de la impotencia entró duramente sobre un jugador del Barça en los instantes finales del encuentro.
Savio: S/C. Volvía a una convocatoria y volvía a jugar 1 mes después. Pasó desapercibido.
Generelo: S/C. Le dio más consistencia al centro del campo pero no tuvo tiempo de más.
Cuartero: S/C. Sustituyó a un correcto Toledo y casi sin tiempo cumplió el expediente.
por Jose Carlos Franco (Joca)
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