Real Zaragoza 1 – 1 CD Tenerife | Crónica
Hay que seguir luchando
El Real Zaragoza no pudo conseguir la victoria ante el Tenerife, en un partido en el que se adelantó nada más comenzar con tanto de Ander Herrera, pero que el equipo tinerfeño poco a poco pasó a dominar hasta conseguir la igualada al filo del descanso. En la segunda parte llegó la polémica, al anular el árbitro un gol legal a Ewerthon por presunto fuera de juego que no fue tal. Al final empate a 1 que satisface más a los visitantes, mientras el Zaragoza continúa provisionalmente tercero a expensas de lo que haga el Hércules.
Ganas, ilusión, fervor, euforia, pasión, nervios, emoción, coraje, desconsuelo, rabia. Sentimientos, sensaciones, valores que se encarnaron este sábado en La Romareda en un duelo por el ascenso. Real Zaragoza y Tenerife plasmaron sobre el terreno de juego sus armas para conseguir el retorno a Primera División, el lugar que les corresponde a ambos por historia y fútbol. Los blanquillos lo hicieron con fe, con pegada mortal en el inicio. Los isleños con presión en el centro del campo, con rapidez venenosa en la zona de ataque, con mucho orden. Al final un empate que dejó más satisfechos a los tinerfeños, merced a un nuevo gol anulado por fuera de juego inexistente del conjunto aragonés. Esta vez fue de Ewerthon. El Real Zaragoza ya sabe, desde hace varias jornadas, que si quiere retornar al Olimpo deberá demostrar que no tiene, tan siquiera, la debilidad de Aquiles. Ese talón, que martirizó al legendario guerrero griego, es para los blanquillos el trío arbitral de turno.
No pudieron comenzar mejor las cosas para los de Marcelino García Toral. El ‘Tren del ascenso’ había efectuado ya su segunda salida, el homenaje al ya legendario Cuartero sirvió de perfecto caldo de cultivo, y La Romareda era un hervidero de pasión. El Tenerife salió acomplejado, y el Real Zaragoza le ganó la partida en el inicio. Apenas habían pasado 90 segundos de juego cuando se estrenó el electrónico. Caffa, incombustible en toda la primera mitad, aprovechó un buen servicio de Arizmendi y probó al exzaragocista Luis García, que recordó sus tiempos blanquillos y rechazó al centro del área, donde un avispado Ander Herrera subía el 1-0 al marcador. Su primer gol como profesional, su primera gran alegría, y una explosión de decibelios en una Romareda atestada hasta la bandera.
El Tenerife, aturdido por el gran comienzo de los del león rampante, tuvo que multiplicarse en tareas defensivas. No evitó, sin embargo, claras aproximaciones zaragocistas como la de Gabi a los diez minutos de juego que, sólo desde la frontal, no supo batir a un esta vez sí preciso Luis García. El Real Zaragoza dominaba el centro del campo, abría bien el juego hacia la banda izquierda y creaba peligro con un Ander Herrera muy participativo en el juego.
Sin embargo los pupilos de Marcelino pronto cedieron el dominio del cuero. El Tenerife comenzó a mandar en el encuentro y, aún con tímidas aproximaciones, a verle la cara a Toni Doblas. La presión que los de José Luis Oltra comenzaron a ejercer sobre la zona de creación ahogaba cualquier intento de ataque zaragocista. El cuadro insular se adueñó del encuentro y los nervios, fieles y angustiosos acompañantes del zaragocismo desde hace una temporada y media, comenzaron a hacer acto de presencia en el municipal. Sólo la suerte del contragolpe podía ser una aliada blanquilla en esta tesitura. Precisamente en una de estas ‘contras’ Gabi tuvo el gol en sus botas, pero Luis García le ganó la partida.
El Tenerife, sin embargo, no volvió a dejarse intimidar y, abanderado por un magistral Nino y un potente Kome en la izquierda, comenzó a cercar el portal zaragocista. Sin demasiado peligro, eso sí, gracias a la buena labor de Ayala y Pavón, pero con una creciente sensación de agobio. Un sentimiento que se materializó en el marcador, precisamente, en el minuto más fatídico de los blanquillos en lo que va de campaña: el 42. Son incontables los puntos que se les han ido a los de Marcelino en esos 60 segundos de tiempo. Ayer fueron otros dos. Esta vez fue Nino, el máximo goleador de la categoría, quien batió a Toni Doblas aprovechando un nuevo fallo en cadena de toda la defensa. Las tablas, la justicia, subía al marcador. Pero la desazón se hacía dueña del graderío.
OTRO GOL MAL ANULADO
Comenzada la segunda mitad Marcelino trató de darle más poso y mordiente a su equipo. Retiró del terreno de juego a Pignol, todo un coladero en la banda zurda, para dar entrada al marginado Paredes, y sustituyó a Ander Herrera, que estaba siendo uno de los mejores zaragocistas sobre el césped, por la ‘Flecha’ Ewerthon. Los cambios fueron acertados a medias porque, si bien Paredes cerró con eficacia su banda y Ewerthon otorgó de mayor velocidad al ataque, la marcha de Ander Herrera privó al Real Zaragoza de clarividencia en el último pase.
Los insulares, mientras tanto, seguían a lo suyo. Que no era otra cosa que cortar balones en el centro del campo y salir con velocidad hacia el área de Toni Doblas. Nino volvió a tener el gol en sus botas pero, esta vez, no acertó con el portal blanquillo. El encuentro entró, mediada la segunda mitad, en un constante ir y venir de un área a otra. Ambos equipos, conscientes de que una victoria podía dejarles el ascenso en bandeja, se empeñaron en desnivelar el marcador. El Real Zaragoza a base de jugadas a balón parado, de disparos desde la frontal; el Tenerife, con contragolpes que no conseguían convertir en mortíferos.
Sí lo hizo, transportar el veneno de sus botas a las mallas, el brasileño Ewerthon. Jorge López cabeceó al palo un envío desde la banda derecha y la ‘Flecha’, libre de marca, subió el 2-1 al marcador. Un tanto que quedó invalidado por la ocurrencia de uno de los asistentes de Miranda Torres, que fue el único ser humano capaz de ver cómo dos defensores del Tenerife, los que validaban la posición del brasileño, se volatilizaban para dejar a este en posición ilegal.
A partir de ahí el encuentro decayó en intensidad y el dominio fue alterno, con un gol anulado al cuadro insular por, esta vez sí, existente fuera de juego. Nino, Caffa y Gabi buscaron el camino del gol pero ninguno lo encontró. Real Zaragoza y Tenerife firmaron un, deportivamente hablando, justo empate. Pero, con la Justicia por delante, el Real Zaragoza debió haber vencido el duelo de aspirantes. Y no lo hizo porque, una vez más, se topó con uno de los grandes obstáculos para el retorno a Primera División: un trío arbitral que quiso ser protagonista. Fin. El Real Zaragoza sólo subirá si demuestra ser el más fuerte de todos los aspirantes. Habrá que seguir luchando hasta el final.
Ficha Técnica
Real Zaragoza:
Toni Doblas; Zapater, Pavón, Ayala, Pignol (Paredes, min.55); Gabi, Ponzio; Jorge López, Herrera (Ewerthon, min.55), Caffa (Songo’o, min.78); y Arizmendi.
Tenerife:
Luis García; Marc Bertrán, Manolo Martínez, Luna, Sicilia; Ricardo, Mikel Alonso (Oscar Pérez, min.72); Juanlu (Angel, min.65), Alfaro, Kome (Ayoze, min.76); Nino.
Goles:
1-0. min.2. Ander Herrera; 1-1. min.43. Nino.
Árbitro:
David Miranda Torres, del Comité Catalán. Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Ayala y Pavón y a los visitantes Ricardo y Luna.
Incidencias:
Buen registro de entrada en La Romareda con 26.416 espectadores.
Puntuaciones (de 0 a 5)
Toni Doblas – 3: Apenas tuvo que intervenir a pesar del constante dominio del Tenerife. Solventó bien su trabajo.
Zapater – 2: Pasó algunos apuros para detener los avances de Kome, especialmente en la primera mitad. No se sumó con eficacia al ataque.
Ayala – 3: Expeditivo en el juego aéreo y en el corte, quizá pecó de una excesiva dureza que pudo costarle la expulsión.
Pavón – 3: Muy bien y seguro en sus intervenciones.
Pignol – 1: Volvió a realizar un encuentro muy flojo, siendo un coladero por su banda. Apenas se sumó al ataque.
Ponzio – 1: Otro partido discreto del argentino. No supo contener al Tenerife en la zona ancha del terreno de juego.
Gabi – 2: Tras su gran partido en tierras vascas se esperaba más de él. No tuvo la fluidez suficiente en la creación. Impreciso.
Jorge López – 3: Dio muestras de su calidad en varios disparos y envíos que no encontraron rematador. Mejor cuando se dejó caer por el centro.
Ander Herrera – 4: Presionó, robó balones y acudió en auxilio del centro del campo. Marcó su primer gol como blanquillo. Con su marcha del terreno de juego la imaginación desapareció del centro del campo zaragocista.
Caffa – 3: Fue de más a menos. Muy activo y combativo en la primera mitad y en los compases iniciales de la segunda, no encontró el gol y se apagó mediada la segunda parte.
Arizmendi – 1: Luchador y poco más. El ariete no tuvo su día y apenas creó peligro de cara al marco rival.
Paredes – 2: Se limitó a cerrar el lateral izquierdo, sin excesivas licencias ofensivas.
Ewerthon – 3: Veloz y combinativo, marcó un gol legal que fue anulado por fuera de juego inexistente. Además tuvo un par de buenas ocasiones que no pudo aprovechar.
Songo’o – S/C: Reapareció tras su lesión, aunque apenas entró en juego.
por Punkarra
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