CA Osasuna 0 – 0 Real Zaragoza | Crónica

Tanta sombra, demasiada noche

“Hoy defendimos bien y atacamos mal”. Aguirre dixit. Y ahí está el resumen de nuestra miserable existencia. Añadiendo a esta frase las imágenes que el partido de hoy nos ha dejado, parecería que ahí acaba el discurso posible. Y es que es así. El Real Zaragoza ha jugado un agónico partido ante un Osasuna inepto y pacato que no ha sido capaz de meterle un gol a un equipo, el nuestro, que hoy ha oferecido su verdadero rostro: el de la inanición, el de la sequedad creativa, el de la esperanza inerme.

Los primeros minutos han perfilado lo que iba a ser el choque. El encuentro nacía con una mala noticia en la alineación zaragocista, pues mala noticia es, hoy en día, que no juegue Gaby, nuestro comandante, el corazón mejor dispuesto, el músculo mejor ejercitado con que ahora contamos, el alma de este harapiento ejército que recuerda a los soldados de “Lo que el viento se llevó” cuando regresan a Atlanta tras la humillante derrota sufrida frente al Norte. Y así hemos visto cómo se producía un ineficaz bombardeo a cargo del saludable ejército navarro, que desde el primer segundo ha puesto sitio a la escuálida Puerta del Carmen que Aguirre había dispuesto para soportar los ataques aéreos de Osasuna. Apenas habían transcurrido seis minutos y nuestros muchachos ya habían achicado varias toneladas de bomas en forma de ocasiones de gol que no se convirtierton en score desfavorable gracias a la protección del manto de la siempre, en Iruña, despreciada Virgen del Pilar. Milagrosas intervenciones de Poncio y Leo Franco impidieron sendos goles en contra, mientras los aficionados blanquillos contemplábamos atónitos cómo el ampate se mantenía en el marcador a pesar de las miles de ocasiones que creaban los torpes jugadores navarros.

A cambio, una única oportunidad inventada por Ander y malograda por Sinama, como explicándole al mundo que este es nuestro mundo, nuestro universo. Nuestro averno. Eso fue todo. Eso fue nada. El partido fue una apuesta al no fútbol y ganaron los dos equipos. Osasuna, en su descalabro futbolístico, no logró batir a un destacado Leo Franco. Ni siquiera con los nueve corners que botó consiguió el propósito, algo que no habría sido injusto pues fue el único equipo con voluntad de ganar durante esta primer parte.

La segunda parte comenzó con movimiento en el banquillo zaragocista. Aguirre optó por controlar un poco más el balón y sustituyó a un desorientado Bertolo por Jorge López. Al principio consiguió su propósito y el equipo aragonés se apropió del juego y del espacio. Eso no supuso que Ricardo temiese por su marco, pero al menos el partido se equilibró un tanto y se atisbó cierta posibilidad de gol. Esos primeros veinte minutos fueron, en realidad, una llamada definitiva a la necesidad de contar con un delantero o dos que sean capaces de interpretar las tímidas propuestas ofensivas que los Lafita, Ander o Jorge López presentan. Es tan doloroso el vacío goleador, tan estremecedora la negrura definitoria de este equipo que uno se atrreve a escribir que muy pocas veces, en la gloriosa historia zaragocista, ha estado tan claro el diagnóstico.

El último cuarto de hora Osasuna ha ejercido su derecho a decidir y ha oprimido a la retaguardia aragonesa. Esta, decidida a sacarnos los colores a sus detractores, ha conseguido mantener la portería a cero, que es mucho, aun sabiendo que sus limitaciones son tales que no podemos sentirnos confortados con el futuro que nos ofrecen. Han soportado los embates de los pamploneses y han contribuido, con su sudor y su sangre, a que el viaje de vuelta deje la puerta abierta a un prolongado sufrimiento, que no otra cosa nos espera.

Partido, en fin, estéril que pone punto y final a la primera parte del plan trazado por Agapito y Aguirre que hablaba de aguantar con un mínimo de dignidad hasta la llegada del mercado de invierno. Ahora comienza un período en el que vamos a jugar a una ruleta rusa en la que, al revés de lo que debería ser, en el tambor habrá cinco balas y solo una posibilidad de seguir con vida. Prohibidos los ataques de pánico.

Ficha Técnica

C.A. Osasuna:
Ricardo; Nelson, Sergio, Miguel Flaño, Monreal; Vadocz (Lolo, m.68), Nekounam; Juanfran, Soriano, Masoud; y Lekic (Aranda, m.68).

Real Zaragoza:
Leo Franco; Diogo, Jarosik, Contini, Paredes; Pinter; Lafita, Ander Herrera (Edmilson, m.92), Ponzio, Bertolo (Jorge López, m.46); y Sinama Pongolle (Marco Pérez, m.80).

Árbitro:
Mateu Lahoz (Comité Valenciano). Amonestó a Miguel Flaño (m.56) y Sergio (m.57), de Osasuna, y a Pinter (m.45) y Ander Herrera (m.90), del Zaragoza.

Incidencias:
Partido de la decimosexta jornada de Liga, declarado de alto riesgo por la Comisión Antiviolencia, celebrado en el estadio Reyno de Navarra ante 15.624 espectadores.

Puntuaciones (de 0 a 5)

Leo Franco: 3. Hoy ha sido el mejor del partido. Ha tenido varias intervenciones decisivas y ha controlado perfectamente los ataques aéreos de Osasuna.
Diogo: 2. Mejor que en partido anteriores. No ha subido con tanta soltura, lo que le ha fijado más en tareas defensivas, que ha siolventado correctamente.
Jarosik: 2. Ha recuperado un tanto su imagen de la temporada anterior. Bien por alto y mejor físicamente.
Contini: 2. Hoy tenía otra mirada. Se le ha visto más presente, más centrado. Ha estado expeditivo y seguro en el corte.
Paredes: 2. En la misma línea que sus compañeros de defensa. Ha tenido algunos problemas con las incorporaciones de Nelson, pero en líneas generales ha actuado con corrección.
Pinter: 1. Ha aportado su esfuerzo en las tareas defensivas. No le da salida al balón y eso se ha notado en un día como hoy, en que se precisaba claridad mental para oxigenar el asedio navarro.
Ponzio: 1. Muy poco preciso en el pase y discreto en el corte. No ha sido su mejor día.
Ander: 2. Su primera acción ha prometido más de lo que luego ha sido capaz de dar. Muy presionado por Osasuna no ha podido dar ese último pase que se le pide. Quizás porque no tiene a quien dárselo.
Bertolo: 1. Hoy no ha encontrado ni el espacio ni el tempo. Su aportación ha sido insignificante y ha sido sustituído.
Lafita: 2. Tremendamente luchador , ha sido en todo momento una preocupación para la defensa de Osasuna. Lástima que no acierte con el gol ni sea capaz de encontrar apoyos para poder combinar.
Sinama: 1. Muy acelerado, no es capaz de romper un fuera de juego. Sus controles de balón son deficientes y no es capaz de proponer una jugada. ¡Ah! Y el gol…
Jorge López: 2. Le ha dado posesión de balón al equipo. Su aportación ha significado más presencia en ataque e incluso ha dispuesto de una tímida ocasión de gol.
Marco Pérez: 1. su salida le ha dado otro aire al equipo. Su velocidad debería ser aprovechada de otra manera, peros sus controles de balón siguen siendo…¿inexactos?
Edmilson: S.C.

por arrúa 10 (Real Zaragoza, Aire Azul)
@japbello

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