CD Tenerife 1 – 1 Real Zaragoza | Crónica
Lejos de todo, cerca de nada
En el pecho de Nano Mesa rebotó, probablemente, la última oportunidad que tenía el Real Zaragoza de respirar la ilusión de un play off casi imposible. Y en el pecho del zaragocismo se imprimió la decimoséptima muesca de los empates infinitos que están marcando una temporada que pasará a la historia como la de los caminos claroscuros.
El equipo de Jim jugó ayer un buen partido ante un rival de gran nivel aunque fue incapaz de obtener el premio que seguramente mereció pero que no tuvo la valentía de recoger. Quizás ocurre que este grupo tiene más de lo que cree pero no cree que tiene lo suficiente. Un laberinto interminable, es decir. Porque un partido que con otros delanteros podría haber acabado con dos o tres goles de ventaja se apagó con un empate que no nos saca de pobres y además nos impide soñar con algo más que no sea esperar que llegue el fin.
Comenzó el partido con la gran noticia de Azón vistiendo galones de titular y un Zaragoza energético, implicado en cada gesto y acertado en todas las facetas del juego. En todas menos en la sustancial: el remate a gol. Cuando Vada consiguió el 0-1 era el minuto 15, pero es justo reseñar que hasta ese momento los rojillos ya podían llevar dos goles de ventaja. Hablamos de las oportunidades de Borja Sainz, que no batió a Soriano cuando este ya estaba superado, y de Álvaro, que no llegó a un centro diagonal por escasos centímetros. Afortunadamente el argentino sí obtuvo botín al recoger un rechace del portero chicharrero después que Azón rematase un buen centro de Borja. Era justo el gol porque el partido tenía un espléndido aroma aragonés
Sin embargo no se supo gestionar bien la favorable situación tras el gol zaragocista. El Tenerife, abrumado por la salida del Zaragoza y atosigado por su afición, nada contenta con su equipo tras cuatro derrotas consecutivas, se echó al monte y logró empatar en tan solo siete minutos. Lo hizo con una jugada del lateral Pomares, cuyo centro rebotó en la defensa zaragocista propiciando que Shashoua rematase a placer batiendo a Cristian. El resultado no reflejaba con justicia lo que los dos equipos habían hecho, pero hablamos de fútbol, esa actividad humana que en demasiadas ocasiones se olvida de otorgar la recompensa adecuada con arreglo a los méritos de los contendientes.
Era el minuto 22 y de ahí al descanso el partido entró en una fase de alternancia y equilibrio. El empuje del Zaragoza se vio compensado con la calidad del Tenerife y eso hizo que los dos equipos disfrutasen de fogonazos que bien podrían haber desequilibrado el choque en uno u otro sentido. Anotamos un disparo de Corredera que se acercó a la escuadra derecha de Cristian y un buen chut de Eugeni que rozó el poste izquierdo. Buen partido, sí señor, aunque de cosecha escasa para lo que en algunos momentos nos prometieron los contendientes.
El choque se reanudó con una composición muy diferente en el lienzo del césped. El Zaragoza se acomodó en una actitud más conservadora, en la que predominaba el orden y el cemento, procurando tener dispuestas todas las herramientas para dañar al contrario con zarpazos certeros y el Tenerife se dispuso al acoso del área de Cristian con su dinamismo característico.
Los minutos discurrieron con parsimonia y las áreas no recibieron noticias de los jugadores durante muchos minutos. El Tenerife ya había hecho sus cambios en el descanso, mientras que Jim movió el banco en el minuto 60: para suplir a Vada, lesionado (otro contratiempo que añadir), y a Álvaro, algo amortiguado. Los movimientos de piezas no variaron el paisaje y hubo que esperar al minuto 70 para que se diese la primera ocasión clara de gol. Fue un buen gesto de Merino, que se llevó el balón con potencia superando a su par, pero su remate, seco y súbito, se fue fuera por un palmo.
La jugada símbolo del partido se produjo poco después. Azón recibió un gran pase que acometió con fiereza y determinación. Un metro antes de pisar el área Soriano, portero local, lo derribó y el zaragozano cayó aparatosamente al suelo. La jugada, de tarjeta roja clara, fue resuelta por el árbitro con una simple amarilla que ni siquiera el VAR logró convertir en roja al mantenerse el colegiado en sus trece. Sin duda una injusta y torpe decisión que perjudicó claramente al Zaragoza.
Fue el momento en que Jim retiró a Eugeni, fundido tras un gran trabajo, por Lluís López, en una clara declaración de intenciones, e introdujo en el terreno de juego al tinerfeñista Nano Mesa, que no fue bien recibido por los suyos, en lugar de Azón, provocando estupefacción en el zaragocismo. Y aún le dio tiempo a situar a Nieto en el centro del campo para reforzar esa línea claramente maltrecha por las ausencias.
Quedaban unos minutos para acabar de romper la vasija canaria y eso estuvo a punto de producirse en el minuto 90. Sabin Merino, desafortunado con el gol, sabe, sin embargo, asistir a los suyos con buenos pases y eso hizo anoche también. Le regaló un balón de diamantes a Nano Mesa que solo tenía que empujarla a la red con Soriano batido, pero eligió la opción más extravagante: empujar el balón con el pecho. La fuerza con que llegó el cuero al portero no fue suficiente para superarlo y así se nubló la oportunidad de lograr un 1-2 que habría sido gloria bendita para un Zaragoza que, estando lejos de todo, podía estar cerca de algo.
El partido acabó en equilibrio insuficiente para unos y otros y el resultado final ayuda a confirmar una verdad absoluta e irrebatible: en esta categoría se pueden hacer muchas cosas bien pero todas son insuficientes si un equipo no cuenta en sus filas con un goleador contrastado. Sin él, el vacío.
Ficha técnica
CD Tenerife:
Soriano; Mellot, Sergio González, León, Pomares (Moore, 68); Aitor Sanz, Corredera (Larrea, 81); Andrés Martín (Mollejo, 76), Shashoua (Rubén Díez ‘Jamelli’, 68); Elady (Bermejo, 46) y Mario González.
Real Zaragoza:
Cristian Álvarez; Gámez, Francés, Jair, Chavarría; Zapater, Eugeni (Lluís López, 76), Vada (Bermejo, 61); Sainz (Nieto, 86), Álvaro Giménez (Sabin Merino, 61) y Azón (Nano, 76).
Goles:
0-1, min.15: Vada. 1-1, min. 22: Shashoua.
Árbitro:
Gálvez Rascón (Comité Madrileño). Amonestó al zaragocista Bermejo (68) y Soriano (72).
Incidencias:
Partido de la Jornada 34 de LaLiga SmartBank 2021-22 disputado en el estadio del Heliodoro Rodríguez ante 12.000 espectadores.
Puntuaciones
Cristian: 3. Poco trabajo y bien resuelto.
Gámez: 3. Gran trabajador, el gol vino por su banda.
Francés: 4. Buen trabajo, consistente y relevante.
Jair: 4. Buena noche, muy atento a todas las situaciones.
Chavarría: 3. Mantuvo una buena línea aunque tuvo lagunas.
Zapater: 3. Trabajo muy correcto. Gobernó y manejó bien los tiempos.
Eugeni: 4. Su gran calidad lo mantiene vivo hasta que se le acaba el físico.
Vada: 3. Comenzó muy metido y con gran vitalidad. Luego bajó y se lesionó. Goleó.
Borja: 3. Tiene mucha intención cuando encara aunque le falta precisión. Asistió el gol.
Álvaro: 2. Se apoyó bien en Azón y buscó movimientos de achique. Se difuminó.
Azón: 4. Demolió a la defensa contraria y generó mucho peligro. Fundamental.
Bermejo: 3. Muy activo, buscó muchas soluciones. Algo desconectado del área.
Merino: 2. Su calidad aún no ha encontrado acomodo en este equipo.
Lluís: 2. Cumplió con la tarea de cerrar espacios y contener al contrario.
Nano: 1. No estuvo cómodo. No le probó jugar en casa. Falló un gol.
Nieto: S. C.
por arrúa 10 (Real Zaragoza, Aire Azul)
@japbello
