Real Zaragoza 1 – 1 Málaga CF | Crónica
El gol no nos cree
Mil balones podrían haber llegado a la línea blanca que separa la gloria de la miseria y ninguno la habría traspasado. No estaba de dios ni del diablo que la noche del sábado el Real Zaragoza obtuviese la victoria ante un alicaído y disminuido Málaga que llegó a la orilla del Ebro hecho unos zorros y estuvo muy cerca de volver a casa con un botín desmesurado y absolutamente inesperado.
Lo vino a decir Escribá en la rueda de prensa: “Más no hemos podido hacer”. Bueno, es una forma de hablar: sí se puede hacer más. Se puede ser más certero, se pueden meter goles. Se puede vencer. Sobre todo si quien está enfrente es el colista, llega malherido y además en el minuto 14 se queda con un jugador menos. Se debe vencer, en fin.
El Zaragoza empezó razonablemente correcto. Al menos, distinto. Sin embargo no podemos juzgar lo que habría significado ese leve cambio de guion en condiciones normales porque en seguida el Málaga perdió a uno de los suyos. Una aparatosa entrada de Jiménez a Bermejo supuso una roja que el zaragocismo agradeció aunque sin mucho entusiasmo, vistos los precedentes ante Eibar y Alavés. Este tipo de situaciones suelen significar un dominio abrumador por parte del equipo beneficiado y un perjuicio a veces insalvable para el perjudicado, pero este Zaragoza está tan debilitado que ni siquiera con esa ventaja es capaz de casi nada.
Una novedad significativa fue la voluntad de jugar en campo contrario. Las diagonales y la búsqueda de la verticalidad fue una constante. Nada de esperar el fallo del contrario, nada de buscar huecos a base de interminables series de pases sin gas. Algunos jugadores se tomaron en serio el regate, el desafío al contrario y eso dio como resultado algunas acciones interesantes que a punto estuvieron de convertirse en gol, pero la falta de acierto, de talento, de calidad, de fortuna, dieron al traste con todas ellas.
Es verdad que había perfume a gol, lo que supone una jugosa novedad, pero no hubo forma de traspasar la portería de Yañez porque ni Gámez, torpe y desviado en su intención, ni Simeone, en tres ocasiones, ni Bermejo, quizás en la ocasión más clara, encontraron la llave del éxito. El portero malaguista estuvo soberbio y las dentelladas zaragocistas no eran lo suficientemente certeras como para acabar con la resistencia andaluza. Así se llegó al descanso, con buenas sensaciones en cuanto a llegada pero con desesperanza por la falta de tino.
Parecía que todo era cuestión de tiempo e, incluso, que Ratón podría ser el guardián que se necesita en estos casos por si al contrario le da por acercarse al área propia y tener un golpe de fortuna. Lo demostró con una buena parada a disparo de Muñoz, buena noticia tal y como están las cosas.
Tras el descanso nos encontramos con la entrada de Larra por Gámez, amonestado, y con una actitud de desgana y falta de ritmo propia de un equipo desenchufado. Solo la aparición de nuevo de Simeone activó al equipo y a la grada, que ya mostraba signos de impaciencia e irritación. Cabeceó un buen córner ejecutado por Zapater pero otra vez Yáñez demostró que podría estar en Catar. Despejó acrobáticamente e impidió el gol blanquillo. Poco después sería Mollejo quien la tendría, pero tras varios quiebros su chut lo atajó Yáñez. De nuevo desesperación.
Escribá se encontró de bruces con la realidad. Sus muchachos están fuera de onda, no encuentran caminos fértiles y están desacertados en los momentos clave. El entrenador valenciano tiró de banquillo y puso a Puche y a Eugeni para tratar de canalizar la ansiedad del equipo y lograr el gol que no llegaba. Estuvo a punto Bermejo con una falta bien lanzada, pero el balón se topó con el larguero. Estuvo a punto Lluís López, pero su cabezazo lo rechazó Yáñez. Y entonces sucedió lo inimaginable. Haitam, un chico de la cantera malagueña, se quedó el balón, rebasó a Fuentes y su chut cruzado sirvió para batir a Ratón. La sensación fue doble: el portero gallego del Zaragoza no nos da puntos y este equipo necesita algo más. Mucho más que un cambio de entrenador.
El fútbol nos enseña cada día que es un deporte impredecible que convierte un choque de goleada a favor en un charco en el que ondea el 0-1 aunque no sea justo. No quedaba mucho por hacer. Balones a la olla y apelar a la épica, esa muchacha que a veces ronda nuestras praderas para librarnos de la miseria. Y en esta ocasión logró llamar a la puerta en forma de remate del siempre vigoroso Simeone. El córner sirvió para que el argentino empalase un chut que salió rebotado tras golpear en un defensa y lograr así obtener un empate que duele pero no provoca desolación, al menos de momento.
La noche sigue siendo negra y el camino próximo se presenta incierto, enganchado a un desequilibrio futbolístico de alto voltaje. No sopla el viento a favor. Tal vez, ni siquiera haya viento.
Ficha técnica
Real Zaragoza:
Ratón; Gámez (Larrazabal, 46), Lluís López, Jair, Fuentes; Grau (Francho, 80), Zapater (Eugeni, 73); Bermejo, Vada (Puche, 66); Mollejo (Gueye, 80) y Simeone.
Málaga CF:
Yáñez; Bustinza, Juande, Burgos, Javi Jiménez; Escassi (Genaro, 68), Luis Muñoz (Ramalho, 77); Hervías (Haitam, 77), Febas (Jozabed, 77), Cristian Gutiérrez; y Sol (Loren, 60).
Goles:
0-1, min. 78: Haitam. 1-1, min. 87: Simeone.
Árbitro:
Busquets Ferrer (Comité Balear). Expulsó a Javi Jiménez (13) con roja directa por juego violento sobre Bermejo. Amonestó a Gámez (30), Bermejo (67), Febas (73) y Burgos (83).
Incidencias:
Partido de la Jornada 16 de LaLiga SmartBank 2022-23 disputado en La Romareda, con 17.000 espectadores.
Puntuaciones
Ratón: 2. Paró una pero en el gol no estuvo bien.
Gámez: 1. Se está desinflando partido a partido.
López: 1. Desorientado y mal ubicado.
Jair: 3. Correcto. Hizo un buen trabajo.
Fuentes: 1. Trató de abrir vías de agua, pero se diluyó.
Grau: 1. No entendió el planteamiento.
Zapater: 4. Muy buen partido. Dio una lección a los jóvenes.
Bermejo: 3. Con iniciativa y decisión.
Vada: 1. Alejado de sí mismo.
Mollejo: 2. Activo y voluntarioso.
Simeone: 4. Su tesón y vigor obtuvo recompensa con el gol.
Larra: 1. Pobre aportación, con errores de bulto y falta de sintonía.
Puche: 1. Desconectado.
Eugeni: 2. Bien a balón parado.
Francho: 1. Corrió y corrió.
Gueye: S. C.
por arrúa 10 (Real Zaragoza, Aire Azul)
@japbello
