Real Zaragoza 3 – 0 CD Leganés | Crónica

Real Zaragoza 3 – 0 CD Leganés | Crónica

Dame el día que es paisaje

El gaucho Giuliano atravesó las llanuras de la Pampa de norte a sur cabalgando sobre el viento. Recogió el polvo que sus contrarios mordieron hasta llegar a la desembocadura de Asier Riesgo. Ahí, en el punto en que el río de la Plata se fundió con el padre Ebro, depositó con la delicadeza propia de los genios un balón con el que soñaremos los zaragocistas. Aunque no sea el gol del ascenso, ni siquiera de la clasificación para un play off que siempre nos ha esquivado. Da igual: el gol del Cholito se quedará para siempre en nuestra memoria, allá donde estemos. Allá donde muramos de amor por el león.

El partido que enfrentó ayer al Real Zaragoza con el Leganés nació con la atonía habitual, con la falta de energía a la que nos lleva cada jornada esta competición que nos mata de aburrimiento. No es fútbol no arriesgar; no es fútbol soñar con la miseria del contrario; no es fútbol abandonar el desafío en la esquina de cualquier calle olvidada. No, eso no es fútbol, pese a que pretenden convencernos de que lo mismo que hacían Cruyff, Maradona o Juan Señor es lo que vemos cada domingo. Mienten. Lo que se presentaba ayer en el césped de La Basílica era un robo a la Historia, un timo de la estampita en el que nadie puede caer.  Ni el Zaragoza quería ni el Leganés era capaz.

Llevaba el partido más de veinte minutos y no podía olvidar que esos zagales que correteaban por el campo eran los mismos que el jueves nos regalaron su presencia en la gala de aupazaragoza.com. Era lo único que me servía para sonreír, para creer que había merecido la pena visitar la vieja Romareda en una deliciosa mañana de primavera. Y en esas estaba el cielo, azul como el color del campeón, cuando un vendaval se acomodó en el corazón de un muchacho de veinte años que entró en modo “¡Sabino, a mí el pelotón, que los arrollo!”. Cruzó el campo de banda a banda, encaró a cuantos rivales le salieron al paso, recogió todos los rebotes posibles, hizo un regate imposible que le liberó de los atónitos defensores y cuando el vituperado Riesgo pretendió ocultar la luz del sol, elevó el balón con finura para lograr uno de los goles del año.

¿Se le puede cambiar la cara a la Luna? Sí. Giuliano lo logró y sus compañeros se sumaron a la causa. El partido adoptó un gesto amigable, muy parecido a la dulce mirada del doctor Villanueva que acababa de recibir el homenaje del zaragocismo y el reconocimiento a sus tres décadas de servicio al equipo aragonés. Tan amistoso fue el aroma que se instaló en el choque que se llegó al descanso con el camino muy bien recorrido y con las fuerzas intactas para afrontar la segunda parte. El Leganés no pudo esconder su lentitud y el Zaragoza decidió ponerse en manos de la firmeza defensiva, de los fogonazos de Giuliano y Bebé y el pundonor del centro del campo, además del buen hacer de los laterales, Nieto y Luna, que ayer mostraron más virtudes que defectos.

Y el fuego. Esa llamarada que atiende por Simeone se cosió el balón a la bota, arremetió con la furia que no cesa y llegó hasta la línea de fondo tras galopada infinita. Su pase lateral no le llegó a Puche pero porfió, porque su sangre no admite otra circulación, y en el segundo golpeo construyó un penalty de esos que el fútbol moderno, el odiado fútbol moderno, nos ha obligado a invitar a nuestra mesa: varios minutos hasta que el colegiado va a una pantalla para decir que sí, que es penal.

El partido pintaba argentino. Vada se quedó la bola y chutó. Riesgo hizo un paradón, pero cuando la sombra de la decepción comenzaba a desplegarse sobre la Romareda el propio delantero remató cruzado y limpio para lograr el 2-0. Otro jugador que respiraba hondo después de muchas jornadas seco. La grada, feliz. El equipo feliz. El doctor Villanueva, feliz. Y lo mejor: en apenas cinco minutos llegaría el 3-0. Sin dejar respiro, sin permitir que el laurel floreciera ni un tanto así. Una jugada limpia por la banda llevada a medias entre Bebé, listo y talentoso, y Nieto, vertical y afinado en el pase, permitió que le llegase a Puche un centro pícaro que el chico remató con la furia del Moncayo.

Maldito horario pero bendito partido. La grada y las peñas y hogares zaragocistas gozaron con la victoria, coronada con una excelente parada de Cristian, el Divino (con permiso de Zamora), y adornada con la estruendosa ovación a Giuliano cuando fue relevado por Eugeni. Desde ahí hasta el final, la placidez de la victoria, la dulzura del éxito, la serenidad del triunfo. Sin duda, en el cielo blanquiazul el eterno Irusquieta, a quien recuerdo verlo conquistar la banda con su rapidez y su carácter, habrá sonreído satisfecho. Como el león de un escudo que merece más tardes como la de ayer. Por zierto: o domingo que viene un ha de cayer y l’atro a devantar. No esmento si digo que lo peito me brinca d’emozión.

Ficha técnica

Real Zaragoza:
Cristian Alvarez; Luna, Francés, Lluís López, Nieto; Vada (Bermejo, m.68), Zapater, Jaume Grau (Alarcón, m.68), Bebé (Larrazábal, m.84); Puche (Pau Sans, m.78) y Giuliano Simeone (Eugeni, m.84).

CD Leganés:
Riesgo; Nyom, Omeruo, Sergio González; Cissé, Rubén Pardo (Gaku, m.74), Undabarrena (Narváez, m.65), Miramón; Raba (Fede Vico, m.74), Juan Muñoz (Karrikaburu, m.65) y Arnáiz (Qasmi, m.84).

Goles:
1-0. M.35. Giuliano Simeone; 2-0. M.58. Vada; 3-0. M.66. Puche.

Árbitro:
García Verdura (Comité Catalán). Amonestó con tarjeta amarilla a Vada, Zapater y Alarcón, del Real Zaragoza.

Incidencias:
Partido de la Jornada 31 de LaLiga SmartBank 2022-23 disputado en La Romareda, con 18.000 espectadores.

Puntuaciones

Cristian: 4. Perfecto todo el partido. Nos regaló un paradón.
Luna: 4. Gran partido del chico. Sólido en defensa y correcto en ataque.
Francés: 4. Feliz regreso. Sujetó muy bien a los delanteros.
López: 3. Buen partido, sobre todo en salida de balón.
Nieto: 4. Magnífico partido. Seguro en defensa y asistió el tercer gol.
Zapater: 3. Como siempre, trabajador y muy serio. Equilibró.
Grau: 3. Estuvo en su sitio aunque pecó de prudente. Aseguró.
Vada: 3. Estuvo de menos a más. De no participar a contribuir a la victoria.
Bebé: 3. Abandonó el protagonismo por el bien del equipo. Bien combinando.
Puche: 4. Buen complemento de Giuliano. Trabajó lo indecible y goleó.
Giuliano: 5. El héroe del partido. Lo hizo todo y todo bien. Extraordinario.
Bermejo: 3. Buen custodio del balón cuando hacía falta. Formal.
Alarcón: 3. Buena aportación, con rasmia y tesón.
Pau Sans: 2. Hizo lo que se le pidió. Presionó y buscó el balón.
Eugeni: S. C.
Larra: S. C.

por arrúa 10 (Real Zaragoza, Aire Azul)
@japbello

aupazaragoza

Deja tus comentarios el foro de AupaZaragoza.com. El Real Zaragoza es nuestra pasión.