Los partidos tediosos | La Lupa

Real Zaragoza 1 – 0 Espanyol

En la última edición del suplemento “Babelia”, del diario “El País”, Rosa Montero escribía un artículo titulado “Las páginas tediosas de la “Montaña Mágica”. En él defiende que nos saltemos sin prejuicios los fragmentos que nos aburran de los libros, incluso de los clásicos, como el citado libro de Thomas Mann, o “Crimen y Castigo” y otras obras de semejante tenor. La autora defendía que existen en los libros páginas y páginas que pueden resultar plúmbeas, aburridas e inconsistentes y que es preferible “saltárselas a paso de carga hasta alcanzar una zona más sustanciosa”, que aburrirse en una lectura cargante y poco atractiva. Es una teoría que, si se pudiese aplicar a la visión de partidos de fútbol “en vivo”, sería muy utilizada. Ausentarse del estadio durante muchos minutos de la basura estaría muy bien, porque algunos bodrios futbolísticos son insufribles, como el Real Zaragoza-Español de este miércoles. Lástima de la enorme dificultad de llevar a cabo esa experiencia. 

La necesidad de los tres puntos era imperiosa para los zaragocistas, era algo evidente, pero desde que pisaron los jugadores el césped de La Romareda en la fría y desagradable noche de ayer, se dedicaron a negar ese evidencia. La primera parte fue un despropósito, con el Español jugando al trote y dominando el ritmo del partido ante un Real Zaragoza inane, sin un átomo de calidad en su juego, incapaz de dar tres pases seguidos sin encontrarse a un rival, con un centro del campo limitadísimo técnicamente y con desajustes defensivos. Nuevamente Roberto, el héroe de las últimas jornadas, con dos actuaciones acertadas, evitó que el Español se adelantase en el marcador. 

La reanudación comenzó con un fútbol tan lamentable como en los cuarenta y cinco minutos anteriores. El Español decidió que no le apetecía atacar más y buscó el empate, lo que provocó que los zaragocistas tuviesen que llevar la iniciativa y se hicieron más patentes las limitaciones técnicas de algunos jugadores, como Eliseu, que marró un clarísimo uno contra uno frente a Kameni. Pero Gay, por fin, y ya iba siendo hora, acertó en los cambios y sacó a la hierba a un enchufado Ander Herrera por el inexistente Aguilar y luego a Lafita por un flojísimo Arizmendi, y mejoraron las prestaciones del equipo, dominando el tiempo del partido a partir de entonces. Un penalti digamos “rarito” de Pareja a Ander, que fue el regalo de jubilación de Iturralde al Real Zaragoza, sirvió para que Colunga anotase el máximo castigo y ganar el difícil y decisivo encuentro, ante la enorme alegría de la afición zaragocista. 

La salvación está muy cerca de conseguirse, aunque nada es como parece y en estos momentos estoy “tocando madera” para que se produzca. En enero de 2010 el pensamiento generalizado en el entorno zaragocista era que el descenso era inevitable. Los fichajes de invierno, acertadísimos, han mejorado, especialmente en la retaguardia, la plantilla y han sido el factor determinante para la mejora en la clasificación liguera. Y aún contando con esos fichajes, la calidad futbolística de los jugadores zaragocistas es de nivel bajo sin paliativos. Para la temporada que viene, esperemos y deseemos que en primera división, se tiene que montar una plantilla competitiva y con mucho más valor técnico en el mediocampo y en el ataque, porque ha llegado el momento de ofrecer mucho más a un zaragocismo que está harto de sufrir penalidades y no recibir ninguna satisfacción. 

José Aurelio Gay: habrá que reconocerle los méritos si salva al equipo. Cierto es que ha tenido 7 fichajes nuevos que han aumentado el nivel ínfimo de la plantilla, aparte de las incorporaciones de Diogo y Obradovic, lesionados de larga duración anteriormente. Para mí han sido decisivas esas incorporaciones para el éxito de Gay, más que su labor como entrenador, plena de errores en los cambios, falta de acierto en las alineaciones y declaraciones al menos “curiosas”. Pero también tiene mérito Gay, ha trabajado el sistema defensivo y conseguido cortar la sangría de goles recibidos. Será renovado seguramente: tiene una ficha baja y es sumiso a las indicaciones de Agapito. Cabe esperar que con una pretemporada para trabajar con los jugadores y un plantilla que haya diseñado conforme a su estilo (que esperemos no sea el de esta media temporada), pueda lograr un equipo más acorde con el gusto del zaragocismo. Habrá que tener confianza en Gay y Nayim. 

Un saludo a todos y hasta la temporada que viene.

Por Jeremy North

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