Real Zaragoza – R. Sociedad | Mirada del Rival

Esta es la primera temporada de la Real Sociedad en Segunda División. Digo bien la primera, porque la pasada campaña estábamos en un estado de shock viendo en el calendario destinos como Ejido, Xerez o Eibar. Éramos un histórico y afrontábamos la campaña con los canteranos más leales, pero sin la protección de las estrellas del calibre de Kovacevic, Karpin, o Nihat. Éramos un club roto en confianza, y nada de aquello parecía real, y nuestra historia pesaba mucho, desde las dos ligas, pasando por las dos copas, una situación interna muy inestable y acabando con la corona que descansa sobre nuestro balón, todo nos pesaba.

Esta temporada es la primera por tanto en la que sabemos que esta división no es sencilla, que como toda la vida, cuesta sacar los partidos adelante, y que la frontera entre un equipo mediocre de primera y uno bueno de segunda no es tan abismal como pudiese parecer. A los canteranos leales de calidad, Aranburu (un gran conductor de balón), Prieto (un gran regateador y protector de balón), e Iñigo Díaz de Cerio (Un goal poacher, un rebañagoles), se les une unos novatos que ya no lo son tanto. La Real Sociedad sigue siendo la misma historia, jóvenes de la casa algo arropados por unos fichajes foráneos o del resto de España.

Los fichajes de este año para arropar a estos jóvenes son incógnitas en los últimos casos, y no seré yo quien engañe a los aficionados de la oposición con lo que se puede apreciar en Youtube, ese sitio en donde todos los jugadores son buenos. Sí que parece, mirando a Marcos y Sergio, que son fruto del análisis concienzudo de Lillo, quien además, parece saber apreciar cuales son nuestras carencias y cual es el complemento ideal para nuestros canteranos. Quizá los fichajes no suenen tan bien como Martí del Sevilla, o Mérida del Arsenal, pero suenan bien en la cabeza de este aficionado, pues parecen fruto de un análisis detenido.

Y ahora el Zaragoza. Todo un clásico de la primera división, y de algunos miércoles europeos. Uno siempre ha sabido que un Zaragoza-Barcelona era sinónimo de buen partido, y que el Zaragoza gusta de hacer un buen fútbol si puede. Me parece un buen momento para visitar Zaragoza. En Anoeta les vi intentando defender como un auténtico primera con una línea muy adelantada, pero aun les falta un poco de gel para defender de esa manera, no presionan como una unidad, y puede ser el momento adecuado para visitar la Romareda, pues asumo que el Zaragoza se puede encontrar con un dispositivo mental similar al que teníamos nosotros la pasada temporada. También me sorprendió ver a un centrocampista jovencillo (la primera vez que me fijé en él) como Zapater, por la derecha. El entrenador parece estar buscando todavía las claves de este equipo y tratando de poner cemento entre los ladrillos.

Es el momento de apoyar, pues las tardes de gloria cuando se habla de una Real o de un Zaragoza, son cuestión de tiempo, ahora son tiempos de brega y faena. Esperemos que aun os pillemos en fase de adaptación antes de vuestra más que segura escalada a los puestos de arriba. Suerte para el resto de temporada.

Por «Sabre», de erreala.com

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