Como boca de lobo
Negra, espesa, engullendo en los colmillos de su violencia a los pobres incautos que creían entrar en un precioso estadio de fútbol, en una de las situaciones más surrealistas que yo recuerde. : violencia neonazi en Anoeta(de un signo y de otro), juro que vi a un cabeza rapada realista llorar por teléfono a su camarada porque : “vamos allí y nos pegan , vienen aquí y nos pegan”.(pero ¿no habíamos quedado en que no había neonazis de “estos” allá? , no daba crédito a lo que veía), violencia larvada en el silencio del viejo que estaba a mi lado, en Tribuna y violencia explícita en la agresión de un borroka(distingo bien la apariencia de cada tribu) al muchacho que se sentaba detrás nuestro con su familia: en Tribuna. Lástima que esto no lo viera la prensa y es raro porque estábamos solo cinco filas por debajo de las cabinas, pero fue mala suerte: las cámaras y los micrófonos se acababan de apagar.
Me hubiera gustado tragarme mis palabras en el café que tomamos antes de entrar cuando estábamos viendo la movida de los idiotas de siempre, y todos los zaragocistas decíamos que “nos avergüenzan”, “por favor, no tenemos nada que ver”. La respuesta que obtuve de un señor muy educado fue: “yo no es que quiera defender a los Indar Gorri pero, pobres, es que van estos ultraderechistas a provocar…”(¿Que vienen de fuera ?pero si acabo de ver a un neonazi “nativo”). De todos modos, creo que necesito un curso intensivo de identificación de grupos ultras e ideologías, ¿o son distintos perros con el mismo collar? ¿se sentaría el rapado con los del Mújica Taldea? Me estoy haciendo un lío.
Cuando oí “ETA, mátalos” (por cierto, señores de la LFP, tomen nota), hubiera querido encontrar el eco de los silbidos del resto de la gente. A mí personalmente, me causó indiferencia, como me resbalaba “Puta Zaragoza, puto Aragón”, (¿y el Pirineo, amigos?, bueno no importa, mientras paguéis el IBI y engordéis a Aramón , me resbala, de verdad).
Lo más jodido para mi fue pensar que después de tantos y tantos años frecuentándoos casi a diario, valorando lo valientes y emprendedores que sois, de haberos ido a visitar tantas veces, la única vez que haya sentido miedo haya sido en el fútbol. Pero cualquiera de estos sabios que nos rodearon ayer, lo hubiera resumido como: el furgol es asin. Y por instantes me metí en la piel de aquella conocida mía a la que se lo ocurrió ir a ver un partido del Nápoles por libre y acabó en medio de los tifosi rivales: espero no tenerla presente en los sucesivos desplazamientos.
Y, afición realista, del partido de ayer sacad esta conclusión: Zaragoza no se rinde. Jamás. Sabed que no pudieron con ella las tropas francesas, ni las carlistas en el asedio del 5 de Marzo. Y espero que vosotros como pueblo lleguéis a dar el ejemplo de valentía que tantas veces dio el nuestro a través de la Historia.
No quiero terminar la crónica sin conceder el premio “Dalí” al personaje más surrealista con el que nos topamos: al tipo ese que bajó en el ascensor del hotel, 80 kilos en canal, camiseta del Zaragoza, bañador y chanclas ¿donde iba “asin” vestido? Aaaahhh, qui lo sá. A Ondarreta no creo.
(Y como aquí va a haber para todos, yo quiero saber si el Real Zaragoza subvenciona viajes a grupos ultras. Se comentó y se daba por hecho. Yo no creo que esto suceda, estoy segura, pero querría obtener la confirmación del club.
Por casta.
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