La encrucijada de Aguirre

Como todo entrenador que llega a un equipo a mitad de temporada, y que ha podido analizar cuáles son sus principales problemas, el mejicano Javier Aguirre, tenía un plan para salvar al Real Zaragoza. Ese plan contaba con dar confianza a los que están, e intentar conseguir jugadores en el mercado invernal, que le dieran esa pequeña diferencia de calidad que le falta al equipo.

La primera parte, la ejecutó con tranquilidad, seguridad y parece que el equipo es competitivo, trabajador, y complicado de ganar. Para eso basta con las ganas, el empuje, y la capacidad de motivación y dosis de confianza que ha dado Aguirre a la plantilla. La segunda parte, pues parecía más complicada, debido no sólo a la falta de dinero, sino también a la falta de mano con las negociaciones, de nuestros “hábiles” mandatarios.

Con estos mimbres, al equipo le ha dado para volver a la pelea por la permanencia, después de un mes de enero espectacular, pero viendo los últimos cuatro resultados, parece que el tanque de gasolina se ha quedado vacío, y las ideas de Aguirre, también.

¿Por qué se ve tan pensativo a Aguirre últimamente? Pues cada uno tendrá su opinión. La mía es que con sus ideas iniciales, el equipo no da para más que para sacar empates o derrotas. También creo que está meditando soluciones fuera de sus pensamientos, y ahí la encrucijada. ¿Muere con lo suyo, o cambia cuestiones en las que no cree? Esto no es nuevo este año, ya que a José Aurelio Gay, le pasó exactamente lo mismo, y fue el inicio del fin para él, ya que empezó a dar bandazos, con cinco defensas, con dos delanteros, y al final, la cosa se fue descontrolando hasta que no había otra solución, que cambiar al entrenador madrileño, porque parecía que la cosa se descontrolaba.

La otra pregunta que se hace Aguirre es: ¿qué es lo que puedo cambiar? ¿El sistema, jugadores, mirar a la gente del B? Mi opinión es que debe de dar con un sistema, donde los laterales sean muy poco importantes, y se pueda jugar con dos delanteros. Ambas soluciones, vienen por jugar con 3 centrales. Con tres atrás, los laterales pasan a carrileros, con lo que defensivamente se les exige menos, y además estos pueden ayudar al medio campo, con lo que se podría jugar con dos arriba (con cuatro defensas, y cuatro en el medio, el equipo se debilita en demasía).

Veremos a ver qué es lo que elije el entrenador mejicano, porque la realidad es que urge sumar puntos y cambiar la dinámica, porque últimamente los equipos de nuestra lucha, están sacando resultados, algunos ante equipos complicados, y la salvación se está poniendo muy cara.

Por gomez.

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