Marketing, merchandising y dejadez

Marketing. Una sola palabra que trae de cabeza a muchas empresas. Se invierten muchos millones de euros al año en ello. Se desarrollan productos, se crean ideas, se analiza hasta los detalles más mínimos por el citado marketing. Y es que claro, esa palabra, ese marketing, ese vender tu producto, mueve mucho dinero.

Que el marketing en el Real Zaragoza es algo inexistente a lo que no se le ha prestado casi nunca la más mínima atención no es una novedad. Han pasado las directivas pero la pésima gestión de este marketing ha seguido ahí como siempre, inalterable. A veces un poco mejor y otras un poco peor pero siempre dejando mucho que desear.

Este año no iba a ser una excepción. El Real Zaragoza comenzó ayer su pretemporada de cara a la nueva campaña sin haber presentado oficialmente las equipaciones que se usarán este año. Ahora no valen excusas de tiempos pasados como que ha habido que recurrir a una marca deportiva porque la otra ha fallado a última hora o que sencillamente el club se ha salvado a última hora y por sorpresa de una desaparición segura. Este año, como otros tantos, se ha vuelto a hacer las cosas mal.

Lo peor de todo es que no hacen falta estudios pormenorizados y exhaustivos. No hace falta contratar a reputados profesionales formados en las universidades de más categoría en este ámbito. O quizá sí. Pero a grandes rasgos no. Hace falta poner un poquito de interés y de cariño en lo que se hace. Nada, un poquito. Darle un poquito a la cabeza en ver cosas que si las vemos los propios aficionados tienen que verlas los profesionales que se dedican a esto, que viven de esto y que cobran de esto. Algunos de ellos, trabajadores del Real Zaragoza, sumas de dinero que no se corresponden al trabajo que se aprecia desde fuera y con las que se podía pagar a profesionales del más alto nivel. En el campo del marketing o en cualquier otro.

Sigamos con las equipaciones. Algo que en estos tiempos y en muchos clubes supone un ingreso económico extra, una publicidad para el club a ras de calle y una forma de captar nuevos seguidores para tu masa social. Seguidores que en un futuro irán a tu estadio y compraran tus productos (como las citadas camisetas) y se seguirá ingresando dinero. Muchos clubes las diseñan según el gusto de su afición, las presentan sus jugadores estrella, buscan formas de comercializarlas, las publicitan. En definitiva, se hacen las cosas bien.

Pero el Real Zaragoza es diferente. ¿Para que se van a molestar en hacer las cosas ya no bien, si no medio bien? Se presentan a los nuevos fichajes con las camisetas del año pasado. ¿Imagen? ¡Para que!

Lo peor de todo es que estos días entre las personas que van a las oficinas por tema de los abonos y gente que va a las presentaciones de los jugadores hay un grueso de zaragocistas importante que te pasan por delante de la tienda del club. Es una ocasión IDONEA para intentar vender las nuevas camisetas ganando dinero y ganando afición. Eso es algo que cualquier empresario con un mínimo de idea lo sabe y lo aprovecha. Pues tampoco. Total, ¿Para que?

Y ya, por si no fuese poco, la campaña de socios este año tiene como imagen principal a varios aficionados del Real Zaragoza. Otro escaparate idóneo y otra vez que se pasa de aprovecharlo.

Esto no es falta de formación ni de medios. Esto es, simple y llanamente, DEJADEZ.

El Real Zaragoza está en una situación delicada. Aunque no lo esté pero esa situación delicada es un motivo añadido para prestar más atención en este aspecto. Puede parecer una tontería pero no lo es.

El club necesita el aumentar la masa social, el captar nuevos zaragocistas y el aumentar ingresos económicos. Compite en desventaja contra Real Madrid y FC Barcelona por tanto se tiene que hacer un esfuerzo añadido en este sentido. Porque esos dos clubs no tienen que mover un dedo para captar gente. Pero el Real Zaragoza sí. Y no uno, si no las dos manos.

Me he referido únicamente al tema de las equipaciones este año. Pero tenemos también una tienda online obsoleta, un merchandising que también y que en Abril/Mayo (Mayo, ¡¡mes por excelencia de las comuniones!!) cueste encontrar tallas de las equipaciones del Real Zaragoza. Es una chapuza tras otra. Da pena, vergüenza y termina por asquear.

Eso sí. Y se me olvidaba. ¿Para que vamos a molestarnos en este aspecto si podemos desangrar económicamente aún más a los pocos socios que nos quedan? ¡Claro que sí!

Por Cuñao.

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