Levante UD 4 – 2 Real Zaragoza | Crónica

Levante UD 4 – 2 Real Zaragoza | Crónica

La nit del por (La noche del miedo)

El zaragocismo tiene los párpados en carne viva. En demasiadas ocasiones nos hemos frotado los ojos al no creer lo que estamos viendo sobre el terreno de juego, de tan patético o ridículo es. Como ayer. Otra vez, una vez más. Cuando en el minuto tres el Real Zaragoza ya había encajado un gol, el dolor no nos maceraba por el tanto recibido, sino por la facilidad con que nos habían rasgado la vergüenza. Y lo que siguió durante los minutos iniciales no hizo sino acrecentar la incredulidad y el pasmo. Catastrófica noche, entonces. Enorme bofetada a la dignidad.

El partido se presentaba como una ocasión para confirmar la candidatura a todo ante uno de los equipos más potentes de la categoría. A él llegó Luis Milla con dos novedades en la alineación forzado por las lesiones de Cabrera y Morán. Para suplir al primero optó por el joven y desafortunado en su debut Bagnack, en una decisión que provocó  incertidumbre entre la afición. Para hacer olvidar a Morán el turno fue para Wilk. Nunca un equipo se cayó tanto con tan pocos retoques, pero desde el minuto 0 se vio que la cobertura blanquilla era un bocadillo de gelatina, una broma muy mal pensada para contrarrestar al portaaviones valenciano.

La línea medular, que hasta ahora había vivido a la sombra de la potencia de Zapater y la discreta puesta en escena de Morán, se quebró ayer como cristal y ese hecho fue una mala noticia para una defensa endeble, nerviosa y superada dramáticamente. Bajo palos, Irureta no fue capaz de otorgarle a sus compañeros la seguridad necesaria en días de extrema fragilidad como el de ayer. Ese era el lienzo sobre el que un gran Morales desarrolló varias pinceladas magistrales, siempre por el lateral de Isaac, desarbolado y desnutrido. La buena noticia fue comprobar que este equipo tiene pegada. En esta ocasión a balón parado. Y el ejecutor se llama Lanza, capaz de acomodar el balón en la escuadra contraria con su bota de seda y aliviar un tanto el agobio. El empate llegó en el minuto 12.

Los chicos del Ciutat de València no se inmutaron, sin embargo. Siguieron a la suya y como tenían muy bien estudiado el partido percutieron una y otra vez por las bandas porque estaban seguros de que los goles, varios, llegarían si conseguían poner a prueba la flaccidez visitante. Y lo hicieron muy bien. Mientras el Real Zaragoza no acababa de entender qué estaba pasando, Roger primero y Campaña después remataron sendos centros al área poniendo en evidencia el desastre defensivo aragonés. Ni Cani, con su calidad, ni Lanzarote con su talento ni Xumetra con su velocidad consiguieron inquietar al portero granota, que tampoco tuvo que comprobar si la pólvora de Ángel ayer estaba seca o le había afectado la humedad de la Malvarrosa.

Tras el descanso Milla sustituyó a Isaac por Fran y pronto tuvo que retirar a Bagnack, que recibió un codazo de Roger que debió ser roja, lo que algo habría ayudado a afrontar la segunda parte. Como otro habría sido el partido si el árbitro no hubiera pitado un penalti que no fue. Fueron dos detalles que no tapan la falta de calidad, intensidad y talento que ayer nos regaló el Zaragoza, pero el fútbol es un deporte tan sumamente injusto que incluso con una propuesta tan deplorable los de Milla ayer fueron capaces de meter dos goles en campo del sólido líder que es el Levante. Lo demás, lo esperado. Una segunda parte un tanto más equilibrada por la relajación de los locales y porque los aragoneses tienen mucho arriba. Tanto que a veces, aunque no quieran, construyen ocasiones.

El choque fue, pues, un monumento a la desidia, un ejemplo de lo que no debe volver a producirse, un reflejo nada pálido de Palamós, un remedo de vuelta a tiempos muy oscuros. Este equipo anoche dio miedo. Tiene que armarse en la defensa, tiene que recuperar a Cabrera y Morán e incorporar a José Enrique. Y este equipo tiene que aferrarse a la idea de que lo más importante en momentos como este es considerar como verdades incuestionables la paciencia y la fortaleza. Y no reblar.

Ficha técnica

Levante UD:
Remiro, Pedro López, Chema, Postigo, Abraham (Toño, m.82); Natxo Insa, Espinosa, Campaña (Lerma, m.56); Jason (Montañés, m.74), Morales y Roger.

Real Zaragoza:
Irureta, Iza (Fran, m.46), Bagnack (Javi Ros, m.62), Marcelo Silva, Casado; Lanza, Wilk, Zapater, Cani (Juan Muñoz, m.70), Xumetra y Ángel.

Goles:
1-0, m.3: Jason. 1-1, m.11: Lanza, de falta directa. 2-1, m.23: Roger. 3-1, m.38: Campaña. 4-1, m.61: Roger, de penalti.4-2, m.69: Lanza, de falta directa.

Árbitro:
Medié Jiménez (C. Catalán). Amonestó por el Levante a Roger, y por el Zaragoza a Ángel y Xumetra.

Incidencias:
Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga 1,2,3, disputado en el estadio ‘Ciutat de Valencia’ ante 11.698 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del empleado del club Manuel Pérez y del soldado valenciano Aaron Vidal, fallecido en Irak.

Puntuaciones

Irureta: 0. Muy mal partido. Inseguro, nervioso y errático.
Isaac: 0. Desbordado por Morales, mostró una apatía preocupante.
Bagnack: 0. Derrotado antes de empezar. Le viene muy grande el club.
Marcelo Silva: 2. El más maduro de la defensa. Debe tener cuidado con su fuerza.
Casado: 1. Muy desubicado y poco acertado en el trato del balón.
Zapater: 2. Trató de llegar a todo, pero estuvo completamente solo.
Wilk: 1. Muy blando, no aportó nada al equipo.
Lanzarote: 4. Metió dos goles sublimes.
Xumetra: 2. Lo intentó pero Abraham se lo impidió.
Cani: 2. Su talento fue determinante para mantener la ilusión. Se lesionó.
Ángel: 1. Desasistido y poco afortunado.
Fran: 2. Sostuvo algo mejor la banda.
Javi Ros: 2. Algo mejor en la contención aunque falto de creatividad.
Juan Muñoz: 1. Discreto e irrelevante.

por arrúa 10 (Real Zaragoza, Aire Azul)
@japbello

aupazaragoza

Deja tus comentarios el foro de AupaZaragoza.com. El Real Zaragoza es nuestra pasión.

1 Comentario

Comentarios

(required)