CD Mirandés 2 – 0 Real Zaragoza | Crónica
Este equipo está de miranda
Dice Jim que “esa expulsión no se puede permitir en el fútbol profesional” y tiene toda la razón. Pero también es cierto que ciertos planteamientos futbolísticos son incomprensibles para una afición tan castigada, humillada y malherida como la zargocista. Digo esto porque después de sufrir tan dolorosa derrota como la de ayer en Miranda de Ebro se antojan insuficientes las explicaciones del mister. El partido que nos regalaron los jugadores es indigno y vergonzoso y las sensaciones que nos proporcionan están muy próximas a la desesperanza y la desolación.
Se presentaba el Real Zaragoza en Anduva con la innegociable necesidad de ganar y para lograr ese objetivo el entrenador alicantino optó por una disposición novedosa y, cuando menos, arriesgada. Jugó con tres centrales de partida por primera vez en la historia y esa decisión condicionó el resto de la alineación. Clemente de carrilero, Vada junto a Eguaras y Francho y arriba Narváez y Álvaro como doble vértice ofensivo. Una apuesta rara, de difícil digestión antes del partido, de imposible asimilación después del 1-0 y de peor absorción al comprobar que eso ocurría en el minuto 13.
El equipo recibió una seria herida muy pronto pero exhaló su último suspiro en el minuro 37, cuando Vada nos enseñó cómo se pueden perder los nervios y cometer un error fatal que destroza el trabajo de todo el grupo. Su expulsión, injustificable, fue el puntp y final de un encuentro que nació torcido y finalizó retorcido por la ineptitud de los jugadores y la falta de respuesta del entrenador.
Podríamos hacer un “copiapega” de las crónicas de muchos de los partidos de esta temporada, pero sobre todo de los dos anteriores. El Zaragoza jugó a la taba, a sumar pasecitos desustanciados y mostrar cómo no se debe afrontar un partido de fútbol en la Liga Smartabank. Lo he escrito en varias ocasiones: en este campeonato casi todos los equipos juegan a nada pero lo que saben hacer lo hacen muy bien. Sin embargo, esta temporada Jim ha elaborado demasiadas variantes buscando el arca perdida y ha acabado girando sobre sí mismo para no encontrar sino abismos y barranqueras.
Desde el minuto 1 el partido fue del Mirandés. Taponó la iniciativa aragonesa, cerró los pocos caminos que buscaron los de Jim y con tres pases le rompieron la espalda una y otra vez. No hizo falta esforzarse mucho, porque con tan solo dos chuts a puerta ya lograron un gol. Una filtración de manual, un centro al área pequeña y un remate de cabeza. Todo eso se lo hicieron los chicos de Lolo Escobar a un equipo que jugaba con tres centrales. El Zaragoza, por su parte, disparó varias veces a puerta pero sin fuerza ni precisión y sus aproximaciones eran bombas fétidas que los burgaleses desactivaban con acciones simples pero eficaces.
El fútbol es un deporte donde hay que saber y poder y los jugadores zaragocistas ni tienen calidad ni poseen el físico que se requiere en esta categoría. Las dos afirmaciones ayudan a comprender su inoperancia, aunque por si fuera poco ahí estaba Vada para acabar de destrozar el débil plan de Jim. Su acción merece el reproche y el castigo de sus jefes, porque con su gesto hizo mucho daño. No obstante, no fue la única causa del desastre. Ahí el entrenador tiene que actuar, gestionar, decidir, pero Jim no supo conjugar ninguno de esos tres verbos. Aguantó con lo puesto, en el descanso no reaccionó y el Mirandés se aprovechó de la situación para jugar con sus muchachos como un gato con un ovillo de lana. Decepcionante.
Los jugadores castellanos vieron que el viento soplaba a favor y echaron toda la leña a la hoguera en la que se estaba abrasando el Zaragoza. Desbordes, llegadas, combinaciones y disparos a puerta. Todo lo hacía el equipo local. Como ese magnífico chut de Gelabert en el minuto 57 que se estrelló en el larguero de Cristian, ayer nervioso y errático. No sería el único, porque Brugué repitió acción y resultado en el minuto 70.
El segundo gol asomaba por la esquina de la inanición del Zaragoza, agotado de esperar el fin y sin pulsaciones que ofrecer. Solo hubo un remate de Narváez consecuencia de una falta ejecutada por Zapater, pero a todas luces se veía que el equipo estaba sin sangre, sin luz, sin alma.
Jim hizo algunos cambios: el ya mencionado Zapater más Borja, Azón y Bermejo, pero ninguno de ellos aportó lo necesario para equilibrar el choque. Antes al contrario, el Mirandés logró el esperado segundo gol. De nuevo Marqués cabeceó tras acción deficiente de Cristian. Era lógico, pues sobre el campo solo había un equipo que supiera hacer su trabajo y ese era el Mirandés. Poco más que añadir: la tercera derrota consecutiva se acababa de consumar. El tercer partido sin marcar se acababa de firmar. El tercer resultado claro en contra se acababa de sustanciar. Debacle.
Este equipo está ahogado. Le falta aire y un plan posible. Los jugadores no forman parte del proyecto, hay demasiados hombres desenchufados y el entrenador no tiene discurso creíble. Hablar de no rendirse ya suena vacío por repetido. El general Custer tampoco se rindió en la batalla de Little Bighorn pero Caballo Loco y Jefe Gall pasaron por encima de su cadáver.
Ficha técnica
CD Mirandés:
Lizoain; Carreira, Arroyo, Capellini, Sanchís (Iago López, 46), Rementería (Erik, 89); Gelabert (Oriol Rey, 64); Riquelme; Hassan (Olguín, 80), Brugué; y Marqués (Letic, 89).
Real Zaragoza:
Cristian Álvarez; Gámez (Sainz, 64), Francés, Lluís López, Jair, Clemente (Bermejo, 76); Eguaras (Zapater, 64), Francho (Adrián González, 81), Vada; Narváez (Azón, 76) y Álvaro Giménez.
Goles:
1-0, min. 13: Marqués. 2-0, min. 79: Marqués.
Árbitro:
Milla Alvendiz (Comité Andaluz). Expulsó con roja directa a Vada (37) por agresión. Amonestó a Francho (11), Sanchís (21), Gelabert (24), Capellini (39), Carreira (46), Arroyo (68), Clemente (71) y Francés (83).
Incidencias:
Partido de la Jornada 22 de LaLiga SmartBank 2021-22 disputado en el estadio de Anduva ante 3.000 espectadores.
Puntuaciones
Cristian: 1. Mala actuación. Los dos goles llegaron tras deficientes decisiones.
Gámez: 0. Le sentó fatal la nueva dispisición táctica.
Francés: 1. Mal partido. Riquelme le ganó en todo.
Lluis López: 0. Inseguro y errático. El segundo gol, una lección de mal central.
Jair: 0. Desajustado e inoperante. No supo jugar con otros dos centrales.
Clemente: 1. No es su posición y menos con tres centrales. Padeció.
Eguaras: 1. Cometió muchos errores y no encontró el camino.
Vada: 0. Su acción lo descalifica.
Francho: 1. Desorientado y despistado. Sin sitio.
Narváez: 1. No está. Lleva demasiados partidos ausente e irritable.
Álvaro: 0. Otro partido más sin espacio ni momento que rescatar.
Zapater: 1. Ha perdido energía y protagonismo. En declive.
Borja: 1. Alborotado y equivocado en sus decisiones.
Azón: 1. Desasistido y fuera de sitio.
Bermejo: 0. Perdió muchos balones y equivocó su papel.
Adrián: S. C.
por arrúa 10 (Real Zaragoza, Aire Azul)
@japbello
