RCD Mallorca 3 – 2 Real Zaragoza | Crónica
Capitulación en Mallorca
Después de estar meses languideciendo por Primera División, los jugadores terminaron por entregar el honor y la vergüenza de un equipo y una afición que no se merece nada de lo que está viviendo. Una derrota más fuera de casa y una nueva bofetada a otro desplazamiento masivo de zaragocistas. El fin de un proyecto que apuntaba a las cotas altas de la Liga pero que se ha estrellado contra su propia ambición.
Jamás pensé a principio de temporada que me tocaría narrar los dos fracasos más sonoros de este annus horribilis, la eliminación de la UEFA y el descenso a Segunda División. Jamás nadie se imaginó este desenlace a principio de temporada con una plantilla confeccionada para dar un paso adelante y superar lo conseguido en la anterior. Jamás se creyó que el Real Zaragoza ni su gente se merecía otro descenso a Segunda División.
En ningún momento de la tarde, llegó a salvarse del descenso, todo los resultados fueron malditos, como si estuvieran orquestados por un mente macabra, pero además de todo eso, era ya demasiado tarde para arreglar el desastre. Incluso la hora que se demoró el comienzo del partido fue una señal del destino, al que parece que le daba vergüenza explicarle al zaragocismo como terminaba la historia.
Puede que jugaran buen partido en lo que se refiere a lo futbolístico y que combinaran lo que no han hecho en todo el año. Pero como equipo sigue siendo un desastre. Sintomáticos fueron los archiconocidos desajustes en la defensa. El Mallorca en busca de su sueño europeo se aprovechó de ello para lograr su primer gol, pero la evidencia se confirmó en el segundo gol mallorquinista. Y así no se va a ningún lado. Da vergüenza verlo repetido y detallarlo. Es el claro reflejo de lo que es este equipo actualmente.
Poco más del partido, los goles de Oliveira fueron estériles, como lo fue la victoria del Mallorca. No le sirvió de nada. No sirvió nada en Son Moix. Todo pasó en el tiempo sin hacer un cambio en la historia que parecía predestinada. Nada de lo que intentaron en busca de respectivos objetivos sirvió de nada. Y eso es lo más triste.
El Zaragoza no se rinde, que ha atronado por los cuatro costados de la ciudad y que sigue vivo a lo largo de los años, no fue un lema acertado y que no reflejaba la realidad. A Zaragoza la rindieron. O la vendieron. La vendieron desde la directiva que les ha estallado el juguete que manejaban con alegría en las manos. La rindieron los jugadores, obcecados en intereses personales. La terminaron de apuntillar desde su entorno, que siempre masajeaba sus oscuras obsesiones.
Y se quedan los de siempre. Como siempre. Los que realmente descienden a Segunda. Llega el tiempo de pedir explicaciones y pedir soluciones. Llega el tiempo de exigir claridades y pasos correctos. A este momento llega una afición zaragocista derrotada y cansada de remar a contracorriente, de levantar una y otra vez la moral de su león herido. Llega el momento de que otros den la cara.
Que no nos pase nada.
Aún con todo, como lo hicimos siempre, ¡VOLVEREMOS!
Ficha Técnica
R. Mallorca:
Moyá, Molinero, D. Navarro, Nunes, F. Navarro, Basinas, Ibagaza, Varela, Arango, Güiza y Webó.
R. Zaragoza:
César, Juanfran, Sergio, Ayala, Zapater, Gabi, Celades, S. García, D. Milito y Oliveira.
Goles:
1-0 Güiza (15′), 1-1 Oliveira (55′), 2-1 Webó (64′), 3-1 Castro (92′), 3-2 Oliveira (92′).
Árbitro:
Iturralde González, vasco. Amonestó a Webó, Nunes, del Mallorca; a Sergio García, Celades del Zaragoza.
Incidencias:
Partido correspondiente a la trigésimo octava jornada de la Liga disputado en el Ono Estadi ante unos 17.000 espectadores. Unos quinientos aficionados del Zaragoza desplegaron una pancarta en una de las gradas del Ono Estadi con la leyenda «Zaragoza no se rinde». Antes del encuentro se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento del médico de la selección española de fútbol Genaro Borrás. El partido comenzó una hora más tarde tras la decisión del colegiado vasco Eduardo Iturralde de aplazar su inicio por la fuerte lluvia que cayó sobre Palma en la tarde de ayer. Un espontáneo saltó al campo poco antes de que Iturralde diera el pitido inicial..
Puntuaciones (de 0 a 5)
Un claro CERO para los jugadores que jugaron.
por Txacin
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