Sevilla FC 5 – 0 Real Zaragoza | Crónica

Un insulto a la afición

El Real Zaragoza encajó una sonrojante goleada en su visita al Ramón Sánchez Pizjuán de Sevilla, en el que ha sido el peor partido que uno le recuerda en mucho tiempo. Ridículos parecidos de la presente temporada en el Nou Camp o Vicente Calderón, han quedado cortos en comparación con el partido jugado frente los sevillistas. La “manita” recibida en Nervión, casi parece un alivio ante lo que podía haber sido una goleada realmente humillante.

Es muy difícil ponerse a escribir unas líneas después de ver un encuentro como el que hemos podido presenciar hoy. Este Real Zaragoza hace mucho tiempo que es una caricatura de equipo. En casa, más o menos consigue mantener el tipo, gracias principalmente a la solvencia de sus delanteros, que, cuando el equipo se ve “obligado” a jugar al ataque (como sucede en La Romareda), demuestran con creces su categoría. Pero a domicilio, es otro cantar. Allí no siempre se sale con la actitud adecuada, y los delanteros suelen pasar sin pena ni gloria, el medio campo apenas carbura, mientras la zaga sigue cometiendo múltiples errores defensivos que condenan al equipo una y otra vez. El Real Zaragoza únicamente ha sumado una victoria en sus últimos 21 desplazamientos ligueros. Desde que el 3 de Febrero de 2007 el equipo consiguiera hacerse con los tres puntos en el estadio de Montjuich, ha sumado 11 puntos sobre 63 posibles, únicamente ha anotado 17 dianas, y ha encajado la friolera de 40 goles. Todo esto centrándonos únicamente en liga, porque si se recuerdan partidos fuera de casa de UEFA o Copa, ante Aris, Pontevedra o Rácing, la cosa sería todavía peor. Son simples números, pero que plasman perfectamente la indolencia crónica de un equipo, que en cuanto sale de La Romareda es incapaz de dar, salida tras salida, el nivel mínimo exigible, no ya para luchar por cotas europeas, sino incluso para poder mantener la categoría. Y lo peor de todo es que en este aspecto se va de mal en peor. La afición está ya totalmente resignada y tiene perfectamente asumido cuando se dispone a ver un partido del Real Zaragoza a domicilio, que, con mayor o menor ridículo, va a ver perder a su equipo, o, en el mejor de los casos, si el día se presenta favorable, poder aspirar a un empate.

Pero esto no es lo que ocurrió en el Ramón Sánchez Pizjuán, donde el espectáculo ofrecido por el Real Zaragoza ha sido sencillamente bochornoso. Y eso que el Sevilla debería haber acusado el desgaste que suponía haber disputado partido de Champions, apenas 72 horas antes. Y eso que el mal estado del terreno de juego, tras las copiosas lluvias caídas, para nada hacían presagiar un partido con el que la afición sevillista pudiera disfrutar tanto del juego de su equipo. Pero cuando se le otorgan al rival tantas facilidades, como en el día de hoy, por muchos factores en contra que a priori pudieran tener, lo lógico y normal es que el Sevilla haya terminado pasando como una apisonadora por encima del Real Zaragoza.

El equipo aragonés mantuvo el tipo escasamente un cuarto de hora.

Hasta ese momento, se defendía con cierto orden de las embestidas sevillistas, e intentaba salir a la contra, pero sin crear ningún peligro. A los 14 minutos se lesionaba Sergio Fernández tras realizar una entrada a un contrario, y debía ser sustituido cinco minutos después por Paco Pavón. Apenas habían transcurrido unos segundos desde que había ingresado en el terreno de juego, y sin tiempo para asentarse en el mismo, cuando un magnífico centro de Dani Alves, era rematado por Luis Fabiano, que anticipándose a la defensa, conseguía romper el 0-0 inicial, y dar inicio a la goleada. Era el principio del fin, el comienzo de una noche aciaga en todos los aspectos, negra para el zaragocismo.

Cinco minutos después, una gran combinación, otra vez entre Dani Alves y Luis Fabiano, y de nuevo ante la pasividad defensiva zaragocista, terminaba con el segundo tanto del equipo hispalense, también el segundo del Pichichi la de la Liga española. Y ahí empezó el espectáculo del Sevilla, jugadores como Dani Alves, Maresca, Luis Fabiano, Kanouté, Jesús Navas o Diego Capel, traían por la calle de la amargura al centro del campo y la defensa del conjunto aragonés. Todo fue ya coser y cantar para el cuadro andaluz.

El 3-0 no llegaría hasta el minuto 43, cuando un buen pase de Luis Fabiano a Kanouté, terminaría con una jugada embarullada y con el balón en el fondo de la portería impulsado finalmente en propia meta por Ayala. Pero anteriormente habían dispuesto de sus claras oportunidades para marcar Jesús Navas en el 26 y 28, Diego Capel en el 30, Kanouté en el 31 y 33, Maresca en el 36, y de nuevo Diego Capel en el 39. La goleada ya al descanso podía haber sido histórica. La última ocasión del Sevilla en la primera parte llegó en un cabezazo de Luis Fabiano que saldría por encima del larguero, en el tiempo de añadido, que de milagro no llegó a ser el cuarto tanto.

La segunda mitad, siguió por los mismos derroteros por los que terminó la primera. Jabo Irureta introdujo en el campo a Albert Celades en sustitución de un muy desafortunado Alberto Zapater. Pero apenas a los cuatro minutos de la reanudación, una jugada calcada a la del tercer tanto sevillista, pero en la portería contraria, terminaría de nuevo en el fondo de las mallas. Era el 4-0, y el segundo gol en propia puerta concedido por parte zaragocista, esta vez por Carlos Diogo. El lateral uruguayo, que ya andaba pasado de revoluciones se auto-expulsaría pocos minutos después, para terminar de dar facilidades al Sevilla, tras una dura entrada sobre Diego Capel.

El partido estaba ya totalmente sentenciado. Jabo realizó su segundo cambio, quitando a Ricardo Oliveira dando entrada en su lugar a Chus Herrero. Por su parte el Sevilla retiraba a Luis Fabiano para meter a Kone y Tom de Mul entraba en sustitución de Jesús Navas. Y en el minuto 67 llegaría el quinto y definitivo tanto, en una falta sacada desde la derecha del ataque del Sevilla, que Keita, totalmente libre de marca, desde el punto de penalty, cabecearía junto al palo diestro de la portería de César Sánchez. 5-0 que se dice pronto, y dando la imagen más lamentable y penosa que se le puede recordar a este equipo.

Segundos después, el propio Keita era sustituido por Renato. Y de ahí al final, nada de nada, un simple entrenamiento del Sevilla, que pudo conseguir el sexto, en ocasiones de Maresca en el 76, Kanouté en el 78, De Mul en el 82 y de nuevo Kanouté en el 84. No es por querer hacer leña del árbol caido, pero la goleada ciertamente podía haber sido escandalosa a tenor del gran número de oportunidades de las que dispuso el Sevilla. Afortunadamente, Rubinos Pérez tuvo el detalle de no añadir ni un segundo en la segunda parte, para alivio de la sufrida afición zaragocista que estaba presenciando el encuentro por televisión.

Y ahora nueva salida consecutiva, el próximo domingo habrá que visitar al Levante, en el Ciudad de Valencia. A pesar de ser ante el colista, a día de hoy, cualquier rival es capaz de hacerle un roto a este equipo. Los números fuera de casa ahí están, da igual que se juegue ante el Madrid, que ante el Murcia, ante el Barcelona que ante el Nástic, ante el Valencia que ante el Recreativo, ante el Sevilla que ante Pontevedra o el Aris. El resultado siempre suele ser el mismo. Y ojo que una nueva derrota en Valencia, podría encender las luces de alarma. El descenso cada vez está más cerca, hay que dejarse de mirar UEFAS e Intertotos. Este equipo a lo único que puede aspirar a día de hoy es a conseguir cuanto antes los 42-45 puntos necesarios para mantener la categoría. Y para ello hay que ganar cinco encuentros. Esperemos que el primero sea la semana que viene, porque si no, la congoja se va a apoderar ya de manera acuciante, de los que más sufren con este equipo, que no son otros que los aficionados.

Ficha Técnica

Osasuna:
Palop, Alves, Mosquera, Escudé, Adriano, Navas (67′), Keita (71′), Maresca, Capel, Fabiano (58′), Kanouté, De Mul (67′), Renato (71′), Koné (58′)

R. Zaragoza:
César, Diogo, Sergio (19′), Ayala, Juanfran, García, Zapater (46′), Luccin, Gabi, Oliveira (54′), D.Milito, C. Herrero (54′), Pavón (19′), Celades (46′),

Goles:
1-0 (19′): Luis Fabiano. 2-0 (24′): Luis Fabiano. 3-0 (43′): Ayala (pp). 4-0 (50′): Diogo (pp). 5-0 (68′): Keita.

Árbitro:
Rubinos Pérez, C. Madrileño.. Expulsó a Diogo (53′) y mostró cartulina amarilla a Sergio (16′), Gabi (22′), Luccin (36′), Chus Herrero (79′).

Incidencias:
30.000 espectadores. Una de las peores entradas de la temporada. La lluvia tuvo la culpa.

Puntuaciones (de 0 a 5)

No sé si es justo o injusto, pero un partido como el de hoy no merece otra cosa que un cero general para todos. Las explicaciones, creo que sobran.
César – 0.
Diogo – 0.
Sergio Fernández – 0.
Ayala – 0.
Juanfran – 0.
Zapater – 0.
Luccin – 0.
Sergio García – 0.
Gabi – 0.
Oliveira – 0.
Diego Milito – 0.
Pavón – 0.
Celades – 0.
Chus Herrero – 0.

por Calimero

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