AD Alcorcón 0 – 0 Real Zaragoza | Crónica
Foto a contraluz
Unanimidad. En el club han optado por defender la bondad de un empate que suma en lugar de poner el foco en los dos puntos que se han restado. Es una opción. Una manera de estar en el mundo. Pero también una postura pacata. Porque se pude defender el botín pero reconocer y lamentarse de que es escaso. No pasaría nada.
En rueda de prensa Julio Velázquez ha explicado y se ha explicado, aunque su mensaje se queda enredado en el galimatías conceptual que tanto le gusta. El partido que jugó ayer el Zaragoza fue un monumento al no fútbol, por mucho que se argumente que “el fútbol actual demanda ser versátil” o que “el objetivo es ser competitivo, tener identidad, y ser difícil de ganar para estar cerca de la victoria”. Veamos.
El equipo aragonés se enfrentó al Alcorcón en un choque de llanura honda, donde el balón no corría gobernado sino que discurría por el terreno sin órdenes coherentes por parte de ninguno de los dos conjuntos. Una primera parte de pelotón con cantonadas, de esos que parecen que no ruedan porque hay demasiadas piedras y porque los jugadores no se atreven a atreverse.
Con el freno de mano echado, ni el aliento del millar de zaragocistas en las gradas del Santo Domingo alimentó el empente de los blanquillos. No se quiso y por momentos se dio la impresión de que no se pudo. La disposición táctica fue ayer una rémora, porque se pobló la defensa y se abandonó cualquier intención ofensiva. Diríase que Velázquez se ha encontrado la libreta de JIM en algún rincón de la Ciudad Deportiva y ha aplicado su catecismo. Es verdad que solo ha perdido un partido pero también es cierto que no logra la victoria con la frecuencia necesaria.
Fue una primera parte de juego horizontal, sin deseos de profundizar ni arriesgar. Con el paso de los minutos el Alcorcón activó el modo osadía y, buscando las espaldas de Mollejo y Gámez, se aproximó a la portería de Badía con cierta intención. Así, el portero catalán tuvo que actuar en dos ocasiones, sobre todo la primera tras cabezazo de Mouriño, para amortiguar sendos posibles goles. Es, de lejos, el mejor fichaje de la temporada y de eso nos alegramos.
Llegar al descanso fue un respiro para los jugadores pero, sobre todo, para los espectadores. El espectáculo había sido “más triste que un torero al otro lado del telón de acero” y en el corazón del zaragocismo no cabía la esperanza después de haber visto esos 46 minutos de despropósitos. Esa sensación la debía de tener también el míster zaragocista, porque tras el descanso modificó el dibujo y esforigó el equipo. Adelantó a Mollejo y dispuso un paisaje un tanto más dinámico. Los primeros minutos sirvieron para desplazar el balón en las cercanías de la casa de Anacker, quien tuvo que intervenir una vez a cabezazo de Maikel Mesa y vio poco después cómo Francho, más suelto y protagonista que en la primera parte, le daba un pequeño susto al botar una falta lateral.
Gámez se lesionó en el minuto 71 y eso le vino bien a Velázquez, que acababa de mover un par de fichas, poniendo a Sergi y Manu Vallejo en el campo en lugar de Azón y Mesa. Completó el trío ubicando a Lecoeuche por el lateral valenciano y con esos movimientos el equipo cogió algo de aire. Fue cuando más cerca se estuvo del objetivo, aunque fuera con una jugada de carambola y pandereta en la que Enrich estuvo a punto de provocar un autogol que, al final, no fue.
No habría sido justo, habida cuenta el mediocre partido ofrecido por los aragoneses, y aunque jugadores y entrenador ponderen el valor del punto, hay que empezar a pisar el acelerador si lo que se pretende es luchar por alcanzar el cielo. A ello debe contribuir la gestión de Cordero, al que le quedan tres días para cerrar una plantilla que, ahora mismo, no entiende de fútbol ni sabe de goles.
Ficha técnica
AD Alcorcón:
Anacker; Iago López, Castro, Rivas, Quintillá; Yan Eteki, Javi Lara (Addai, 70); Víctor García, Javi Pérez (Mosquera, 86); Artola (Bravo, 70) y Obieta (Dyego Sousa, 53).
Real Zaragoza:
Badía; Gámez (Lecoeuche, 69), Mouriño, Lluís López, Francés, Mollejo; Aguado (Borge, 91), Francho (Bermejo, 91), Grau; Maikel Mesa (Manu Vallejo, 69) y Azón (Sergi Enrich, 69).
Goles:
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Árbitro:
Ávalos Barrera (Comité Catalán). Amonestó a Aguado (54).
Incidencias:
Partido de la Jornada 24 de LaLiga Hypermotion 2023-24 disputado en Santo Domingo, con 5.500 espectadores.
Puntuaciones
Badía: 4. Uno de los mejores. Dos intervenciones salvadoras le avalan.
Gámez: 3. Correcto en sus lances pero más cerca del mate que del brillo.
Mouriño: 3. Partido adecuado y serio.
Lluís López: 4. Parece decidido a quedarse. Sereno y resolutivo.
Francés: 3. En la línea de sus compañeros. Cumplió lo que se le pedía.
Mollejo: 2. Bajo en las conexiones y poco fluido.
Jaume: 2. Escaso en la aportación, no pudo serenar las combinaciones.
Aguado: 2. Esquinado en zonas ambiguas, disminuyó su presencia.
Francho: 3. Basculó mejor en la segunda parte. Cuando se centró, estuvo.
Maikel Mesa: 2. Su ubicación entre líneas le supuso vivir en la oscuridad.
Azón: 2. Luchó todos los balones, pero muy solo.
Enrich: 3. Está por la causa y casi provocó un gol.
Vallejo: 2. Este esquema le perjudica. Necesita mayor proximidad al área.
Lecoeuche: 2. Cubrió el expediente.
Bermejo: S. C.
Borge: S. C.
por arrúa 10 (Real Zaragoza, Aire Azul)
@japbello
