Ante la extrema gravedad de la situación en que se encuentra el Real Zaragoza en todos los órdenes, y acuciados por la urgencia de una regeneración que salve el futuro de esta entidad, nace este documento con la finalidad de unir a todo el Zaragocismo en pos de un único objetivo: que se produzca el cambio necesario por el que pasa la supervivencia digna de nuestro equipo.
– Porque el Real Zaragoza es un histórico del fútbol que tras 78 años de vida está atrapado en un proyecto debilitado en lo deportivo, agotado en lo económico y quebrado en lo institucional, llegando a desdeñar sus símbolos identificativos y ninguneando a su masa social.
– Porque el máximo responsable del estado actual del Real Zaragoza es su presidente y máximo accionista, D. Agapito Iglesias García, y sus ejecutivos, habiendo demostrado su rotundo fracaso como gestor de la entidad y su manifiesta incapacidad para afrontar el presente convulso e imprevisible que ha creado. Se han dado numerosas oportunidades, todas ellas desperdiciadas, y márgenes de mejora nunca refrendados con decisión acertada suficiente, evidenciando así que no es posible la viabilidad de un proyecto liderado por el actual máximo accionista.
– Porque el Real Zaragoza es un patrimonio común de gran importancia social y económica para la ciudad y para Aragón. Lleno de historia y sentimiento, que aúna pasiones y voluntades, siendo responsabilidad de todos actuar en cuanto esté en nuestras manos para asegurarle un futuro digno y duradero.
– Porque el Zaragocismo cuenta con legítimos recursos propios, si no para decidir, sí para decir. El futuro del Real Zaragoza trasciende la gestión de un propietario y es cosa de mucha gente.
Por todo ello y porque la resignación no forma parte de nuestro código histórico ni moral, los abajo firmantes.
– Que nuestra preocupación y actuación se fundamenta en el hecho de que estamos ante un problema estructural y no coyuntural, por lo que es preciso y urgente acabar con los males que destruyen el pasado, arruinan el presente e hipotecan el futuro de esta entidad y construir un nuevo futuro acorde a un nombre bordado con letras de oro en la historia del fútbol: nuestro Real Zaragoza.
– Que solicitamos a D. Agapito Iglesias García que venda sus acciones de forma responsable con el futuro de la entidad o al menos hasta el momento en que encuentre comprador dé un paso atrás y permita que sean otras personas capaces, de compromiso firme y sentimiento arraigado quienes dirijan ésta, nuestra institución Zaragocista. No se puede construir sobre buenas intenciones de palabra, errores continuos de aplicación y mentiras manifiestas en la práctica.
– Que igualmente rogamos encarecidamente que las instituciones políticas asuman su parte de responsabilidad en la salvación del Real Zaragoza, posibilitando el nacimiento de un nuevo futuro donde la entidad sea bien dirigida. Todos tenemos en mente el desgraciado ejemplo del Club Baloncesto Zaragoza que no puede repetirse. Destacamos además y especialmente el papel relevante que debe jugar el empresariado aragonés, al que realizamos un llamamiento para que acuda en rescate de este equipo participando de forma directa o indirecta y facilitando la transición hacia una nueva gestión consciente e implicada.
– Que es responsabilidad de todos los sectores sociales, accionistas, abonados, peñistas, zaragocistas en general y medios de comunicación, alzar la voz y actuar en la medida de nuestras posibilidades para romper con esta situación catastrófica y aunar voluntades para abrir un nuevo camino en el que nuestro equipo vuelva a ser lo que fue.
– Que apoyamos a la plantilla y cuerpo técnico partiendo siempre de su total entrega y lucha como punto de partida obligatorio en su trabajo para salvar la situación deportiva del equipo esta temporada, insistiendo en que nuestras miras van mucho más allá de la situación clasificatoria en la tabla.
– Que nos comprometemos a no cejar en nuestro empeño de alcanzar el tan necesario cambio de raíz en la dirección y devenir del Real Zaragoza y para ello expresamos nuestro firme compromiso en permanecer unidos para la consecución de tales fines, facilitando y apoyando en cuanto esté en nuestras manos una justa y ansiada regeneración.
Todo ello hacemos constar y publicamos para su difusión quedando el documento abierto a todas cuantas adhesiones quieran producirse en defensa de nuestro Real Zaragoza y de la recuperación de su dignidad en un futuro acorde a su grandeza.
Así lo hacemos constar en la inmortal ciudad de Zaragoza a 10 de diciembre de 2010.
Nuevos Firmantes:
Firmantes del Manifiesto:
Firmantes Desadheridos:
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