Al final de este viaje El bonito estadio donostiarra fue el escenario en el que el Real Zaragoza cerró una temporada y hasta una etapa histórica. Su encuentro ante los jóvenes jugadores del Sanse cumplió con la mínima exigencia que conllevaba termina
Es duro oficio soñar La Basílica, nuestra vieja Romareda, le dio ayer la última vuelta a la llave con la que cerró una mediocre y gris temporada. Medio vacía, con miles huecos en la grada, el estadio zaragozano que espera con ilusión y escepticismo
Si el fútbol es alegría Asturias es tierra verde y mágica y sus cielos son compañeros de viaje de la lluvia y el mar. Y de eso nos aprovechamos ayer los aficionados que pudimos disfrutar de un partido de fútbol divertido, dinámico y abundante. Nadie
¿Dónde estás, Fútbol? La tarde recibía los últimos rayos de sol cuando un insolente y hasta sorprendido Alcorcón mancillaba con una tercera puñalada la dignidad de un equipo, el Real Zaragoza, por el que un legendario futbolista había dado su vid
Los indolentes de Jim El camino a Vacío va a ser largo, tedioso, exasperante y el sendero que nos lleve a la pared con que se topa Truman Burbank al final de “El show de Truman” aparenta estar lleno de alambradas que rodean un vacuo final de temporad
Ya no te creo Al final resultó inevitable. El Real Zaragoza ni supo ni quiso estar a la altura de las circunstancias y cayó abatido por la inanición al saber que su objetivo ya estaba prácticamente cumplido, que la salvación estaba virtualmente sella
Territorio decepción Es posible que este año el verano haya comenzado el 17 de abril. Quizás quepa convencerse del apresuramiento de la primavera por llegar antes al final de su camino. Tal vez sea hoy el lunes más plácido y estéril de los últimos
Lo peito me brinca “Volar, subir, bajar contigo, sin alas volar”. El balón que Borja Sáinz le regaló al cielo y allí se quedó para siempre viajó acompañado de la melodía de Macaco, el hijo de la aragonesa Mª Teresa de las Heras, y La Basílic
Lejos de todo, cerca de nada En el pecho de Nano Mesa rebotó, probablemente, la última oportunidad que tenía el Real Zaragoza de respirar la ilusión de un play off casi imposible. Y en el pecho del zaragocismo se imprimió la decimoséptima muesca de
Tráeme un titular Y llegó Iván e iluminó La Basílica. El apagón futbolístico que había supuesto el gol de Óscar Gil lo amortiguó el joven, inexperto pero fértil delantero zaragozano, que ayer volvió a darle al zaragocismo un argumento para que